Lo que debería de entrar en la normalidad en cuanto al mantenimiento de un edificio público se convierte en objeto de publicidad política para el partido en el gobierno. En este caso es la Junta, el PP y su delegada en Cádiz, Ana Mestre. Acompañada de toda la artillería pesada en materia de promoción pública, la instalación de dos nuevos ascensores en el Hospital Puerta del Mar sirve ahora como plataforma para el político de turno. Mestre estuvo acompañada por la delegada provincial de Salud, Isabel Paredes, y el gerente de los hospitales Puerta del Mar y San Carlos de San Fernando, Sebastián Quintero.

Los nuevos ascensores son más rápidos, accesibles a personas con movilidad reducida y cuentan con un motor de bajo consumo y recuperación de energía, entre otras prestaciones. El de la escalera central tiene capacidad para 13 pasajeros (aunque por el Covid-19 el aforo se reduce a 5) y una carga de mil kilos, y el del hall principal para 21 (reducido en pandemia a 6) y un peso de 1.600 kilos.

Los trabajos, que comenzaron en julio de 2020, han consistido en la sustitución integral de uno de los ascensores ya existentes en el núcleo central del hall principal (12 paradas y 12 accesos con un recorrido de 38 metros) y la creación de uno nuevo, con una estructura portante acristalada panorámica en el hueco de la escalera central (12 paradas y 13 accesos con un recorrido de 38 metros). El de la escalera central tiene capacidad para 13 pasajeros (aunque por el Covid-19 el aforo se reduce a 5) y una carga de mil kilos, y el del hall principal para 21 (reducido en pandemia a 6) y un peso de 1.600 kilos.

El coste de los ascensores se eleva a 255.718 euros. Cabe pensar que se podrán reutilizar cuando la Junta construya el Hospital Regional que le debe a Cádiz desde hace 15 años. La administración regional informó en su día que iba a incluir este equipamiento en la financiación europea a través del Next Generation.