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De andar por casa

Mezcla y pinturas en el Mentidero

  • Las pinturas de Costus, de diferentes series y épocas, protagonizan gran parte de la decoración de las distintas estancias de esta vivienda

Una de las estancias de la vivienda.

Una de las estancias de la vivienda. / Ignacio Casas De Ciria

La vivienda que hoy recorremos la adquirió su propietario hace 15 años.  Le atrajo la luz exterior que recibe a través del patio de  luces y de los balcones de su fachada. Tiene una superficie de 90 metros cuadrados, los cuales se encuentran  repartidos en una  galería que comunica al  salón, un  dormitorio, un vestidor, un baño y cocina. Para la decoración de la casa, su propietario Ubaldo Naya ha realizado una decoración dinámica, donde los objetos de arte y pintura  protagonizan la totalidad de sus  espacios.

El salón  es la estancia mas vivida de la casa, dedicando una zona de estar y otra de estudio. La zona de estar lo ocupa en gran parte un sofá vintage tapizado con una tela arpillera en rojo y  cojines de cuadros de diferentes tonalidades. Junto a ello se ubica una mesa baja de madera de los años 70, en la cual se apoyan diferentes objetos decorativos, muchos procedente de los numerosos viajes de su propietario. Todo ellos descansan sobre una alfombra italiana de Basetti. En uno de los laterales del sofá se ubica una pequeñita mesa auxiliar, con un textil indio en la parte superior, que da color al conjunto.  Entre los muebles que utiliza en esta estancia, en un lateral, se coloca un antiguo trinchero de principio del siglo XX  pintado en color verde y borgoña y en el que guarda una cristalería y una vajilla de herencia familiar. En otros laterales se ubican diferentes  módulos de bibliotecas de color madera  con libros de diferentes temáticas. También utiliza cerámicas de diferentes tipos, hormigas de metal y objetos de enea, para ornamentar la sala de estar junto a velas, las cuales contribuyen a iluminar el espacio descrito. La zona destinada a estudio se sitúa en una zona angular de la habitación, ocupándolo una mesa cubierta con un textil rojo y crema. En su pared cuelgan numerosos cuadros de Costus y posters de Enrique Naya, hermano del propietario. 

El dormitorio,  de procedencia familiar, es de principios del siglo pasado compuesto por una cama de caoba tallada junto a una pareja de mesas de noche del mismo estilo, época y madera. En la parte superior de las mesas cuelga una pareja de abanicos filipinos de herencia familiar. Una cómoda imperio, en la cual se apoyan numerosas fotos familiares, ocupa uno de sus laterales. Otro tiene un bureau  inglés con vitrina de palillería de caoba. Y en su pared cuelga una gran variedad de cuadros, muchos adquiridos en sus visitas a los diferentes museos durante sus viajes.

El vestidor lo protagoniza en uno de sus  laterales un gran armario de color madera. En otro lateral un sofá  estampado que se utiliza como cama para los invitados, colgando de la pared en la  parte superior, el calendario mariano de Enrique Costus.

La cocina comparte los azulejos de pequeños  cuadros  diferentes en  tonos grises y negros con el mobiliario blanco. De una antigua despensa se ha reciclado sus mármoles de Carrara y se ha utilizado para una gran barra en la cocina.  Entre los detalles que ornamenta este espacio, destaca una serie de latas antiguas adquiridas en diferentes países, así como una gran colección de platos marroquíes que cuelga de sus paredes. También decora  este espacio una colección de fotos en blanco y negro de diferentes ciudades realizadas por su propietario. En esta zona se ha recuperado el original techo de vigas de madera.

El baño utiliza el color azul  para sus paredes que lo combina con los azulejos de diseño  griego en blanco y azul. Entre los objetos que  cuelgan de la pared se encuentra una máscara de Nepal y un espejo indio que aumenta la dimensión del espacio. 

En su decoración a  juego con diferentes estilos, en el que se mezcla  los  muebles de diseño y el mobiliario vintage con otros antiguos de procedencia familiar. Todo ello junto a una gran gama de  colores llenan los diferentes espacios, creando una atmósfera arriesgada y única.