Tras tres años eternos, durante los cuales se han chocado con numerosos problemas surgidos desde distintas administraciones, el Mercado Gastronómico que va a ocupar el edificio histórico de la estación ferroviaria de 1905 comienza a dar importantes avances pues su objetivo es estar abierto en la Navidad de 2018. Por lo pronto, la idea es que se esté trabajando en preparación de las nuevas dependencias a lo largo del primer trimestre del próximo año.

A la vez, se está realizando un intenso plan de comercialización con contactos con numerosas empresas hosteleras tanto gaditanas, como nacionales e internacionales. El interés es evidente y va paralelo con el importante desarrollo turístico que está experimentando la capital gaditana en los últimos años. En este sentido, algunas cadenas interesadas en abrir en Cádiz no encuentran locales lo suficientemente amplios para sus necesidades, posibilidad que ahora se le ofrece en la vieja terminal ferroviaria.

En la parte central del Mercado se abrirá un gran espacio para actividades lúdicas

El plan de comercialización sitúa en las dos torres de la fachada principal (con unos 400 metros cuadradas cada una) sendos operadores potentes, capaces de atraer a un público variado. Las dos naves laterales ofrecen locales con una media de 55 metros cuadrados cada uno, además de una terraza de unos 20 metros cuadrados. Entre las firmas contactadas se apuesta por ocupar más de un local, para así contar con más espacio.

La zona central mantiene el peculiar diseño, a base de antiguos vagones de tren, ideado por el estudio de Álvaro Linares. Aquí el interés se centra en la cocina gourmet.

En la nave más cercana a la avenida de Astilleros se deja espacio, de entre 450 a 650 metros cuadrados, para un supermercado.

Aunque el modelo del Mercado gira alrededor de la gastronomía no se descarta la entrada de otro tipo de oferta comercial, como agencias de viajes o alquiler de vehículos.

En el centro de la gran nave donde durante años llegaron los antiguos trenes se abrirá un gran espacio de unos 300 metros cuadrados con un escenario donde se podrán desarrollar diversas actividades culturales y lúdicas.

Tras solventar los problemas administrativos ya se está trabajando en el diseño técnico del nuevo complejo, perfilando las zonas de cargas y descargas, las salidas de emergencia, la seguridad, los servicios de agua, luz, saneamiento...Una serie de equipamientos esenciales en un centro de estas características que hacen que la superficie puramente comercial se quede en algo más de 3.000 metros cuadrados, de los más de 5.000 que tiene la antigua estación término. Aún así va a ser uno de los mercados gastronómicos más amplios de todo el sur de España.

El desarrollo de este proyecto va en paralelo a la urbanización de todo el exterior, que no es competencia de los promotores del Mercado pero que sin embargo dependen de ello. No se quiere, cuando se inaugure el centro, que éste esté rodeado por obras.

La situación ya es conocida. El Ayuntamiento va a adecentar todo el exterior de la avenida de Astilleros, pues su reforma integral aún va a tardar; a la vez, adecentará también lo que hoy es el aparcamiento de Adif y lo que fue la estación de autobuses interurbanos, como paso previo a su conversión de un parque público. Una parte de las terrazas de los nuevos locales de hostelería del Mercado Gastronómico tendrán vistas a esta zona verde y a la muralla de la ciudad.

Desde la propiedad se confía en una gestión coordinada de todas estas obras. En las mismas se incluye también el futuro hotel que se va a levantar sobre el edificio del vestíbulo de la estación, sobre cuyo proyecto ya se está trabajando.

Respecto al vestíbulo de la terminal, la intención de Adif es abrirlo al uso público, aunque lleva ya una década terminado, cuando el Mercado esté en funcionamiento por lo que el acceso se haría por esta instalación.

El Mercado Gastronómico llega en un momento de evidente esplendor para el sector hostelero de la ciudad. Son continuas la apertura de nuevos locales, todos con diseño muy cuidado, tanto en el casco histórico como en extramuros. Son apuestas en su mayoría en clave local pues las grandes cadenas tienen muy complicado encontrar locales libres con una superficie amplia. El Mercado se ubica también en un polo de desarrollo con la remodelación de los terrenos portuarios y la mejora en los usos del frente de la Puerta de Tierra.