La Junta de Andalucía elaborará un nuevo mapa de infravivienda de Cádiz con el fin de establecer los criterios y parámetros de sus próximas actuaciones en la capital. Así lo anunció ayer la secretaria general de Vivienda, María José Bejarano, durante la visita a las obras de rehabilitación de la finca ubicada en los números 1 y 3 de la calle Troilo, una actuación que concluirá a final de mes y que permitirá la recuperación de once viviendas en el edificio, el regreso de ocho familias ahora realojadas y la llegada de otras tres nuevas familias.

El anuncio de la secretaria de Vivienda, en presencia del delegado territorial Federico Fernández, contrasta con la existencia de un mapa de infravivienda elaborado recientemente por el Ayuntamiento de la ciudad y conocido por todas las administraciones y entidades incluidas en la Mesa Tripartita de la Vivienda, cuya última reunión se celebró el pasado mes de junio. Bejarano indicó ayer a los medios, al ser preguntada por lo que aún queda por hacer en esta materia en Cádiz, que los técnicos y profesionales de su departamento serán los encargados de actualizar el mapa de la infravivienda para contar con un nuevo documento en el que apoyar "los criterios y parámetros" de las próximas actuaciones.

Ocho familias de las que vivían en la finca regresarán a las nuevas viviendas próximamente

De momento, a finales de este recién estrenado agosto se espera que concluyan las obras de la finca situada en la calle Troilo, en uno de los accesos al barrio de Santa María. La administración autonómica presentó ayer la reforma integral de una finca cuya actuación se vio dificultada por la aparición de cuatro aljibes, descubiertos durante los trabajos de prospección arqueológica, que obligaron a modificar el proyecto para conservarlos y que alargaron el plazo de ejecución de las obras inicialmente previsto.

Pero la finca, según se pudo comprobar ayer, luce ya su aspecto casi definitivo, a falta de algunos elementos y las once viviendas del edificio, cuatro de tres dormitorios y siete de dos, están a punto de poder recibir a sus viejos inquilinos y a los nuevos.

Porque como explicó Bejarano, ocho de las familias que ya residían en la finca volverán al barrio mientras que otras cuatro -el edificio original tenía doce viviendas- han renunciado por distintos motivos. Así, habrá tres familias nuevas en el bloque con viviendas que serán asignadas, según marca la normativa, a través del Registro Municipal de Demandantes.

Los inquilinos abonarán una renta mensual que oscila entre los 267 y los 296 euros, una cantidad que depende del número de habitaciones de cada vivienda y que, según explicó María José Bejarano, podría "ajustarse" si algunas de las familias presenta dificultades para este alquiler, una circunstancia que valorarán los servicios sociales.

Fue en diciembre de 2014 cuando se anunció la rehabilitación del edificio de Troilo, con entrada también por Teniente Andújar, para la construcción de estas once viviendas, aunque hubo que esperar dos años, hasta enero de 2017, para que se firmara el contrato con la empresa adjudicataria de las obras, Grucal Andalucía, que logró imponerse en un goloso concurso público al que se presentaron 47 empresas. Y hace algo menos de 20 meses comenzaron unas obras que han contado con una inversión de 705.503 euros.

De tres plantas y azotea, con ascensor, la finca de fachada y patio de origen indiano presenta ahora una luminosa rehabilitación a la que contribuye la montera que corona el patio central. Las viviendas tienen el mobiliario de cocina instalado, cuarto de baño con placa de ducha y recias ventanas de madera. La azotea está coronada por la montera acristalada, cuenta con paneles solares y desde ella se puede divisar, en sus distintos rincones, el segundo puente, el remate del frontispicio de la Cárcel Real, la Torre Tavira, las Cuatro Torres de la plaza de España y numerosas cúpulas de templos gaditanos.