Construir una nueva comisaría para la Policía Nacional es "prioridad absoluta" para el Ministerio del Interior. Y para ello, dar un emplazamiento definitivo es vital en una ciudad donde el suelo, precisamente, no abunda. Teniendo en cuenta estos dos factores, el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, mantuvo ayer una fugaz entrevista con la alcaldesa para reafirmar la intención del Estado de construir la comisaría en el entorno de la Plaza de Sevilla y la avenida de Astilleros.

En concreto, el emplazamiento de la nueva sede de la Policía Nacional se localizaría en la pastilla que en esa zona se ha destinado a uso administrativo. Se trata de un espacio situado en la margen izquierda de la avenida de Astilleros (en sentido salida de la ciudad), donde el Cuerpo Nacional de Policía compartiría sede con otros equipamientos como la Casa del Mar o Capitanía Marítima, cuyas actuales sedes serán derribadas en el futuro para seguir desarrollando el Plan Plaza de Sevilla.

Para confirmar la ubicación definitiva de esta comisaría y empezar a redactar proyectos y tramitar su construcción, el Ministerio de Interior está manteniendo contactos y reuniones con el de Fomento para lograr la fórmula idónea que permita la cesión de esos terrenos actualmente bajo la titularidad de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz a titularidad de la Policía Nacional.

Hasta que no se cierre ese acuerdo, lógicamente, el secretario de Estado de Seguridad no ha querido establecer plazo alguno para que el viejo proyecto de dotar a la ciudad de una comisaría más adaptada a los tiempos y con condiciones idóneas para el trabajo que desarrollan los agentes y funcionarios a diario. Pero Francisco Martínez sí aseguró que este proyecto es "prioridad absoluta" para el Ministerio del Interior, por lo que la intención era agilizar lo máximo posible todo el proceso para contar cuanto antes con el nuevo edificio; aunque trámites que conllevan cesión, permuta o similares figuras jurídicas de terrenos entre dos administraciones suelen llevar su tiempo.

Francisco Martínez quiso destacar las diferentes reuniones que se vienen manteniendo para lograr este fin, la última de ellas ayer mismo entre el propio secretario de Estado de Seguridad, el delegado del Gobierno en Andalucía (Antonio Sanz) y el subdelegado del Gobierno en Cádiz (Javier de Torre), aprovechando la visita de Martínez a la ciudad.

Tanto el secretario de Estado de Seguridad como la alcaldesa insistieron en la importancia de situar la comisaría en un "lugar estratégico de la ciudad". Por eso, ambos coincidían en localizar esa pastilla administrativa junto a la avenida de Astilleros como la mejor opción que actualmente hay sobre la mesa. Para lograrlo, el Ayuntamiento se ha comprometido a colaborar en todo lo que haga falta. "Cádiz tiene que tener una comisaría nueva. Y se tiene que decidir pronto porque la ciudad tiene pocos espacios", comentó Teófila Martínez.

En relación al emplazamiento estratégico de esta futura sede, recordaban que a pocos metros (apenas un kilómetro) más adelante está la Comandancia de la Guardia Civil y el parque de Bomberos; y también que la comisaría daría directamente a una avenida que es salida directa de la ciudad, enfrente de la estación de trenes, de la futura estación de autobuses y junto al puerto. La cercanía y buena conexión con el nuevo puente sobre la Bahía también fue esgrimido por las partes.

Si la opción elegida por Ayuntamiento e Interior finalmente no pudiera llevarse adelante por algún tipo de falta de acuerdo con la Autoridad Portuaria y Fomento, o por cualquier otra circunstancia, la alcaldesa puntualizó que el plan B se localizaría en el recinto exterior de Zona Franca, en algún espacio que todavía habría que definir. Esto supondría llevar la comisaría a la entrada de la ciudad, una opción que no termina de convencer al gobierno municipal, que confía en que Interior y Fomento puedan alcanzar un acuerdo que permita proyectar en breve la nueva comisaría provincial de Policía junto a la avenida de Astilleros, al lado de la Plaza de Sevilla.