La Inspección de Trabajo ve cesión ilegal de trabajadores en el IMD

Nuevo revés contra el escenario laboral en el que se desenvuelve el Ayuntamiento de Cádiz. Pocas semanas después de que el tribunal decretara la cesión ilegal de trabajadores en Onda Cádiz, la Inspección de Trabajo ve probada también esta práctica en el Instituto Municipal de Deportes, a raíz de la denuncia de dos trabajadores de la escuela de surf.

Se trata de dos empleados de la empresa Eulen, que es la concesionaria de la gestión de instalaciones deportivas de la ciudad. En el caso concreto de esta resolución de la Inspección de Trabajo, son los responsables de la escuela de surf municipal.

Parte la Inspección de la premisa de que la descentralización productiva en una empresa “es lícita, y se produce cuando una empresa contrata con otra la prestación de un servicio para recibir el resultado del mismo”, debiendo la empresa contratada “aportar personal, medios materiales, poder de organización y de dirección”. Y si esta relación “se desvirtúa y desnaturaliza”, pasaría a considerarse una situación ilegal. Como ocurre -a juicio de Trabajo- en el IMD.

Teniendo esto en cuenta, se han analizado tres claves que Inspección considera fundamentales para discernir si la relación contractual entre Eulen y el Ayuntamiento es lícita o no.

La primera de ellas guarda relación con las funciones propias del empresario, donde se señala que pese a abonar las nóminas de los dos trabajadores y entregarles la ropa de trabajo, “la gestión preventiva de la actividad y centro de trabajo se ve ampliamente condicionada por la falta de disposición sobre los medios materiales e instalaciones de la misma, en la medida en que el material de trabajo (tablas de surf, kate, etc.) y del centro de trabajo (la escuela de surf) son propiedad del lMD”.

La segunda clave se dirige a la organización “autónoma, estable e independiente” que debe tener una empresa. Y si bien determina la Inspección que Eulen “es una empresa con estructura organizativa propia e independiente del lMD”, por lo que “no se trata de una empresa simulada o fantasma”; aunque el modelo de gestión preventiva es generalizado para toda la labor que desarrolla en sus distintas actividades y no específico para este trabajo de la escuela de surf.

Por último, se analiza la disposición de los medios necesarios para realizar la actividad en cuestión (el surf), señalando la resolución que Eulen “carece absolutamente del control o decisión sobre los equipos de trabajo y medios de trabajo usados en el desempeño de su actividad habitual de sus trabajadores”, que son propiedad y dependen de Deportes. “Eulen no controla el contenido de la gestión de la actividad, las instalaciones y medios para su puesta en práctica son de propiedad de tercero, únicamente aporta a la mano de obra y su ropa de trabajo y epis, así como el abono de sus nóminas, según comprobaciones practicadas”, determina Inspección, que añade que el desarrollo de la actividad analizada “se gestiona y controla directamente por el lMD, es la propietaria de las instalaciones, donde además no tiene más empleados que los dos trabajadores de referencia, de la empresa Eulen, que son los que se encargan de abrir y cerrar la Escuela”.

Es por todo ello por lo que la Inspección de Trabajo ve probada la existencia de cesión ilegal de trabajadores porque Eulen “carece de autorización administrativa para actuar como empresa de trabajo temporal” y porque el contrato con el Ayuntamiento “se limita a una mera puesta a disposición de los trabajadores, careciendo la empresa cedente de los medios necesarios (equipos, útiles e instalaciones) para el desarrollo de la actividad, y con una carencia absoluta de control sobre la organización de las tareas y el trabajo mismo de sus empleados, como consecuencia de una dejación total, en favor del lMD, de su poder de dirección y organización”.

Por todo ello, la Inspección de Trabajo ha iniciado ya expediente sancionador contra la empresa Eulen y contra el Instituto Municipal de Deportes.