La empresa municipal de aparcamientos ha empezado a hacer números sobre el efecto directo que tendrá sobre su cuenta de resultados la implantación del carril bici, la peatonalización de las plazas de España y Argüelles o la conversión del aparcamiento de la Cuesta de la Calesas en un jardín. Ambos proyectos en los que viene trabajando el Ayuntamiento reducirá de manera considerable el número de plazas de aparcamiento de las vías públicas de la ciudad; y entre esos aparcamientos habrá muchos señalizados actualmente como zona azul. Un primer informe elaborado por Emasa -al que ha tenido acceso este periódico- cifra la reducción de ingresos en 701.432,87 euros. Cantidad que supone nada menos que el 64,74% de los ingresos totales que en concepto de zona azul recibió la sociedad a lo largo del pasado año.

El informe fija en 1.099 las plazas de aparcamiento con la consideración de zona azul que existen en la ciudad durante el año; a ellas hay que sumar otras 580 que son las que se habilitan en el Paseo Marítimo y calles adyacentes durante dos meses y medio de verano. Todo ello supuso para Emasa unos ingresos en 2016 que se elevaron a 1.083.390,71 euros (del total de 3.017.322 euros que ingresó la sociedad a lo largo del pasado año).

Esta pérdida de ingresos que se prevé en un futuro a corto o medio plazo, por tanto, es bastante significativa en relación al futuro de la empresa municipal, ya que la recaudación de zona azul viene a suponer un tercio de los ingresos que se obtienen cada año. Si a ese tercio se le recorta casi un 65%, la estabilidad económica queda en riesgo.

Para evitar esta situación -teniendo además en cuenta que una sociedad municipal que acumule dos ejercicios con pérdidas tiene que ser extinguida- Emasa anuncia la elaboración de un documento, en colaboración con la delegación municipal de Urbanismo, que tiene por objeto establecer una serie de medidas con las que paliar esa pérdida de ingresos. En concreto, la gerencia de la sociedad habla de plantear una serie de alternativas "basadas en la implantación de nuevas zonas de aparcamiento regulado".

Esas nuevas zonas se contemplarían, según adelanta el informe, como espacios naranjas, una modalidad de aparcamiento que hasta ahora sólo se ha implantado en la plaza de las Tres Carabelas y la Avenida del Descubrimiento. Fue el anterior equipo de gobierno quien introdujo esta modalidad en la recta final de su mandato, dejando pendiente cuando en 2015 se produjo el cambio de gobierno la posibilidad de ampliar esa zona naranja a otras zonas de la ciudad como el Campo del Sur, el Parque Genovés, el entorno de Asdrúbal, la Avenida del Guadalquivir o la Avenida de Portugal.

A esta medida se unirían también los aparcamientos en superficie que están en proyecto y que gestionaría Emasa, como los que se quieren habilitar en la Avenida de Astilleros o los que se solicitaron a otras administraciones en los solares del futuro hospital o de la que iba a ser Ciudad de la Justicia en Tolosa Latour.

En cualquier caso, las medidas propuestas (que no han trascendido hasta la fecha) tienen que ser ahora estudiadas por parte del equipo de gobierno, ya que corresponde a la Junta de Gobierno Local delimitar el ámbito del aparcamiento regulado en la ciudad.