Eliminar aquella documentación que está ocupando los archivos y que ya no tiene validez ninguna, para a su vez liberar espacio que pueda dar cabida a nuevos documentos y, de esta forma, aliviar la actividad ordinaria de los juzgados. Esa es, en muy resumidas cuentas, la operación que la Administración de Justicia puso en marcha en los Juzgados de la ciudad hará cuestión de un año. Y el resultado de este período ha sido la destrucción de más de 100.000 expedientes judiciales.

El denominado expurgo de expedientes se limita actualmente a diligencias previas y a juicios de faltas, siendo en todo caso de fecha anterior al año 1998, que es la fecha que marca la prescripción de los delitos y faltas. En total, se han destruido ya 111.281 expedientes, que han quedado divididos en 2.146 cajas.

Esta operación se ha realizado en dos fases: una primera que alcanzó los casi 21.000 expedientes judiciales correspondientes a los juzgados de instrucción número 5, de menores número 1 y de instrucción número 1; y en esta segunda fase que acaba de finalizar se han destruido 90.324 expedientes, procedentes de los juzgados de Instancia número 5 (donde se han eliminado archivos de casos que se remontan al año 1963), Instrucción número 2, Instancia número 3 e Instancia número 2.

El secretario coordinador provincial, Pedro Campoy, explica que el proceso de destruir esta documentación es muy exhaustivo. Dos funcionarios de la Junta de Andalucía son los que se están encargando del expurgo en los juzgados gaditanos. Ellos comprueban caso a caso, realizando además un muestreo de las cajas y expedientes. Es decir, que un número determinado de casos se queda sin destruir para pasar posteriormente a los archivos históricos. Del expurgo realizado hasta ahora en los distintos juzgados de la ciudad, el muestreo suma un total de 10.859 expedientes, distribuidos en 216 cajas. Al mismo tiempo, los datos de cada caso quedan grabados en una aplicación, siendo volcados por estos funcionarios.

Además, Campoy explica que antes de proceder a la destrucción, se publica un anuncio en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, en el que se da a los interesados dos meses de plazo "por si quieren recuperar algún documento". "El expurgo se hace con todas las garantías posibles", asegura el secretario coordinador de la provincia.

Actualmente, este trabajo de selección de expedientes judiciales para su eliminación sigue su curso. Los dos funcionarios destinados a esta labor están trabajando actualmente en el archivo de Instrucción número 4, en Los Balbos. Y es que el acuerdo alcanzado entre la Junta de Andalucía y el Ministerio de Justicia para realizar este expurgo es algo que satisface a todas las partes. Sobre todo porque la liberación de espacio en las sedes judiciales es un aspecto que en Cádiz beneficiará mucho a los propios juzgados, que podrán "aliviar muchos problemas de espacio que tienen actualmente", comenta Pedro Campoy. Además, esta medida se destaca que supone un ahorro económico importante, ya que evita a la administración andaluza tener que costear nuevos alquileres de locales para adaptarlos como archivo.

El deseo ahora es que la labor de expurgo no se detenga, e incluso se amplíe el número de personas destinadas a este trabajo, lo que agilizaría esta eliminación de papel. E igualmente, se vería con buenos ojos que la Junta de Expurgo ampliara el tipo de casos que pueden eliminarse (actualmente limitado únicamente a diligencias previas y juicios de faltas). Y en el horizonte podría situarse el deseo hacia una digitalización total de la Justicia.