El Carnaval de Cádiz ya tiene organizado su dispositivo después de que en la mañana de ayer se reuniera la Junta Local de Seguridad en el Ayuntamiento de Cádiz.

De este modo, entre el Cuerpo Nacional de Policía, la Guardia Civil y la Policía Local se va a superar los 230 agentes durante la fiesta, llegándose a alcanzar en los momentos de mayor afluencia los 300 miembros.

En este sentido, la Policía Nacional contempla un refuerzo de los medios policiales, principalmente en las zonas de alta concentración de personas. Así, complementará sus efectivos de Seguridad Ciudadana propios de la Comisaría Provincial de Cádiz con unidades de UPR (Unidad de Prevención y Reacción), con un dispositivo que se mantendrá desde este viernes 24 de febrero hasta el 5 de marzo. Incluso, también se han planteado dispositivos para la celebración del Carnaval chiquito el 12 de marzo.

Según asegura en un comunicado la Subdelegación del Gobierno, la Policía Nacional tendrá los fines de semana, al esperarse la mayor concentración de personas, unos 120 funcionarios, siendo un centenar durante las demás jornadas.

Los medios de Seguridad Ciudadana y UPR se destinarán básicamente al casco histórico, aunque también estarán pendiente de la zona de la carpa, vigilada con seguridad privada, y del recinto acotado con vallas más cercano a esta. La zona más próxima al cantil del muelle también se va a vallar para evitar caídas al mar.

Tal y como señala la Subdelegación del Gobierno, con la presencia de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía se incrementará en las zonas donde se produce una mayor aglomeración de personas, tales como pregones, conciertos, carruseles, cabalgatas, la sesión de fuegos artificiales y las cercanías de la carpa con el objeto de un riesgo para ellas y un posible aumento de los niveles de delincuencia. En el mismo comunicado se asegura que así se consigue atender más rápida y eficazmente a los perjudicados en la comisión de hechos delictivos y "transmitir una mayor sensación de seguridad entre los visitantes a Cádiz".

Mientras tanto, por parte de la Guardia Civil se van a establecer controles de alcoholemia y de drogas en los accesos y salida de la ciudad, tales como los dos puentes y la autovía de San Fernando. Además, las patrullas fiscales estarán vigilantes para evitar el contrabando de tabaco y también actuará la patrulla cinológica.

Al estar situada la carpa en terrenos portuarios, la Guardia Civil se va a encargar de la custodia del recinto portuario con la colaboración de la Policía portuaria. En total prestarán servicio unos 50 agentes de la Benemérita los fines de semana y alrededor de una treintena el resto de los días.

En los dos fines de semana de Carnaval, entre 100 y 130 agentes se ocuparán de las labores concernientes a seguridad, tráfico y control de venta ambulante ilegal; y entre semana serán entre 70 y 90 los funcionarios que realicen esta labor.

En el dispositivo se contempla tres niveles de actuación que se activarán en función de la afluencia de público. Así, el primer nivel está centrado principalmente en las incidencias derivadas del tráfico rodado de la ciudad. El segundo nivel, en el que además del tráfico se incorpora el control de venta ambulante ilegal, ocupación de la vía pública y vigilancia en materia sanitaria de alimentos, se activará el sábado y el domingo del primer fin de semana de carnaval, el lunes y desde el viernes por la tarde hasta el domingo 5 de marzo.

Por último, el tercer nivel, más centrado en las ocupaciones de la vía pública y en el cumplimiento de las ordenanzas municipales se activará el jueves 23 de febrero y se prolongará durante toda la semana de Carnaval.

Se va a establecer un dispositivo especial en cuanto a los estacionamientos provisionales para autobuses discrecionales, ya que hay una previsión de que lleguen unos 300. Podrán estacionar en el interior de Navantia, así como en los dos márgenes de la carretera industrial, y en la Avenida Fernández Ladreda dirección al exterior de la ciudad, desde la rotonda Cornelio Balbo hasta la Plaza de Asdrúbal, aumentando en el primer sábado con el patio del colegio de San Felipe Neri.

Dentro del plan de tráfico aprobado se potenciará la utilización del transporte público. No obstante, los aparcamientos de la ciudad estarán operativos y ofertarán unas 12.000 plazas de aparcamiento, al igual que el año pasado.

Asimismo, también se dio a conocer que este año se va a reducirá en dos horas el horario de la carpa, de manera que cerrará a las siete de la mañana.