Cádiz

Cádiz fortificada

Cádiz fortificada

Cádiz fortificada

Más de cincuenta construcciones para mirar y no ser vistos, para lanzar señales de humo, fuego o artillería y conservar el territorio frente a las invasiones que venían del norte -por tierra- y desde todos los frentes que en Cádiz tiene el mar: nada menos que 260 kilómetros de costa. En definitiva, todo un amplio legado de fortalezas, castillos, baluartes y murallas contra piratas e invasores.

Situada entre dos continentes y entre dos mares, Cádiz es un capricho de la geografía. Esta singularidad y el empeño de todos los pueblos por conservar el territorio, son el origen del amplio catálogo de construcciones defensivas que integran la provincia.

 

Ruta de los castillos Ruta de los castillos

Ruta de los castillos

La Ruta de los Castillos pasa por fortalezas medievales, torres, atalayas y almenaras que, en muchos casos, han determinado la silueta de los pueblos gaditanos y han pasado a ser su seña de identidad.

Castillos de Interior

Empezando por el Alcázar de Jerez -de origen almohade- en la campiña se suceden un buen número de fortalezas.

No hay que olvidar que, en la Edad Media, en gran parte de la provincia de Cádiz estaba el límite entre territorios cristianos y musulmanes, de ahí que muchos pueblos y ciudades sean “de la Frontera”. Arcos, Jerez, Conil, Chiclana, Vejer.

 

Castillos de Interior Castillos de Interior

Castillos de Interior

Por otro lado, en Medina Sidonia, la Torre de Doña Blanca, el Arco de la Pastora, el Arco de Belén y la Puerta del Sol constatan la importancia de su antiguo Alcázar.

Cerca de esta localidad, encontramos el Castillo de Torrestrella, mientras que desplazándonos al sur llegamos al de Benalup-Casa Viejas.

El conjunto fortificado de Vejer, con sus murallas, torres y puertas, son testimonio de la habilidad con que sus constructores se adaptaron a la difícil orografía del terreno, una colina de 190 metros de altura.

 

Castillo de Torrestrella Castillo de Torrestrella

Castillo de Torrestrella

Asimismo, el Castillo árabe de Gigonza (a sólo 10 kilómetros de Paterna) y el de origen almohade de Alcalá de los Gazules cierran este histórico recorrido por el interior y la comarca de la antigua laguna de La Janda.   

Las defensas marítimas

Tomando Sanlúcar como punto de partida, podemos llegar hasta Tarifa con una línea costera salpicada de fuertes y torres de vigilancia.

En Sanlúcar, destacan los castillos de San Salvador y Santiago. Muy cerca, en Chipiona, puede visitarse el castillo erigido por Guzmán el Bueno en el siglo XIV; y algo más al sur, en Rota, el Castillo de Luna, palacio y sede del Ayuntamiento.

 

Castillo de San Marcos Castillo de San Marcos

Castillo de San Marcos

El Castillo de San Marcos, levantado sobre una antigua mezquita árabe, es sin duda una de las construcciones más significativas de El Puerto de Santa María. En él, se afirma que residió Colón cuando solicitó ayuda al duque de Medinaceli para su proyecto de navegación. También aquí es significativo el Castillo de Doña Blanca, del que resta una única torre.

Por otro lado, Cádiz presenta un complejo sistema de fortificación iniciado en 1596, tras el saqueo que padeció la ciudad a manos de las tropas del conde de Essex: las Puertas de Tierra, las murallas de San Carlos, los castillos de Santa Catalina y San Sebastián, los baluartes de Los Mártires, Santa Bárbara, La Candelaria y Santiago, o las defensas de Cortadura son ejemplos de las necesidades defensivas de esta ciudad rodeada de agua.

 

Defensas de Cortadura Defensas de Cortadura

Defensas de Cortadura

La ruta prosigue por los castillos de San Romualdo o el situado en la isla de Sancti Petri de San Fernando, espacio mitológico y también fuente de inspiración de Manuel de Falla y su composición “La Atlántida”.

 

Isla de Sancti Petri Isla de Sancti Petri

Isla de Sancti Petri

La costa nos lleva hasta las torres de Conil y el Castillo de Zahara de los Atunes, refugio fortificado que servía para proteger su mayor fuente de riqueza: la pesca, de ahí que, en su interior, ya en el siglo XV, se encontraba una factoría en la que se preparaba la pesca para el mercado. Su nombre: el Castillo de la Almadraba.

En Tarifa, nos encontramos con el Castillo de Tarifa, una de las fortalezas mejor conservadas de Europa y uno de los monumentos más visitados de la provincia.

 

Castillo de Tarifa Castillo de Tarifa

Castillo de Tarifa

Para concluir: los restos del Fuerte de Santa Bárbara de La Línea de la Concepción, que recuerdan el sistema defensivo durante la Guerra de la Independencia.

 La Sierra, los Pueblos Blancos y el Campo de Gibraltar

La fortaleza de Arcos y los castillos de Bornos y Espera abren el recorrido por la zona gaditana con más densidad de castillos. El de Matrera, en Villamartín; el de Tavizna, cerca de Benaocaz, o el Castillo de Fátima, a pocos kilómetros de Ubrique, son también puntos destacados de la ruta.

El Castillo de Zahara de la Sierra y la construcción nazarí de Olvera son las señas de identidad de estas villas serranas. Torre-Alháquime y Setenil de las Bodegas también cuentan en su patrimonio con dos castillos.

Castillo de Zahara de la Sierra Castillo de Zahara de la Sierra

Castillo de Zahara de la Sierra

 

Pero, probablemente, dos de las fortificaciones más interesantes de la provincia son las de Jimena y Castellar. La primera es de construcción musulmana y conserva una portada magnífica, mientras que la de Castellar se encuentra muy bien conservada, con su típico acceso en recodo –para frenar el ímpetu de los invasores- y su pequeño caserío, dentro del recinto amurallado.