Bajar la presión del agua en todos los domicilios y vaciar las fuentes iban a ser, tras el cierre de las duchas de la playa este pasado verano, las primeras medidas que el Ayuntamiento aplicaba para contrarrestar la situación cada vez más preocupante que está generando la sequía. Unas medidas que se presumían iniciales de otras que habrá que ir adoptando teniendo en cuenta que el escenario es cada vez más alarmante y que la sequía podría prolongarse en el tiempo.

Pero transcurridas varias semanas, y aplicada ya esa bajada de la presión del agua (que ha pasado de 4 kilos a 3,7 durante el día, manteniéndose la misma presión de 3 kilos que ya estaba establecida por las noches), las fuentes siguen manteniendo su actividad sin cambio alguno; ni bajada de presión de los artísticos chorros, ni vaciado, ni siquiera mantenimiento habitual que obliga al vaciado y llenado de manera periódica.

A mediados de noviembre anunció el alcalde el vaciado de las fuentes, explicando días después que se haría de forma progresiva. Pero después de más de dos semanas desde esa última referencia a la sequía, las fuentes de la ciudad siguen a pleno rendimiento, sin que se haya procedido a su vaciado.

Es más, esta pasada semana se ha procedido al vaciado de al menos una de las fuentes de la plaza de San Juan de Dios; pero al finalizar las labores de limpieza, la misma ha sido llenada de nuevo, manteniendo hasta hoy su normal funcionamiento, en contra de lo anunciado por el gobierno local.

Sí dijo el alcalde en noviembre que esta medida de las fuentes tenía más de simbólico que de efectiva, con un pretendido cariz concienciador para todos los que pasen por las fuentes más simbólicas de la ciudad y las vean sin grifos abiertos y sin agua en los vasos. Pero hasta ahora la única que cumple esos requisitos es la fuente de las Puertas de Tierra, que está siendo sometida a trabajos de reparaciones que han obligado a su vaciado.

La fuente de la plaza de Sevilla sigue funcionando con normalidad.

Por tanto, más de 20 días después de anunciar la medida, las fuentes siguen llenas y a pleno rendimiento, a la espera de que el Ayuntamiento acometa finalmente el vaciado.

También está pendiente la constitución del comité de seguimiento que el pleno del último día de noviembre acordó constituir para ir acordando el camino que seguirá la ciudad para hacer frente a esta sequía; un comité de técnicos que será el que vaya tomando las decisiones respecto al uso y consumo del agua en la ciudad a partir de ahora.