Mariano Rajoy pactó en la noche del viernes con los 13 presidentes autonómicos del PP que mañana todos ellos solicitarán una reunión urgente del Consejo de Política Fiscal y Financiera, debido a la incertidumbre que les crea que el Gobierno no cuente con un Presupuesto mientras ellos tienen que elaborar los suyos. Las discrepancias con la titular de Economía, Elena Salgado, son dos. La primera es que la previsión de crecimiento para 2012 es el 2% del PIB, una cifra que al día de hoy está muy alejada de la realidad y que es la que se utiliza para calcular el montante de los ingresos.

Pero, además, los presidentes autonómicos mantienen que el Gobierno debe prorrogar los Presupuestos mediante un decreto ley, una discusión de carácter técnico que, sin embargo, dejaría al siguiente Ejecutivo la responsabilidad de adoptar otro tipo de medidas. La petición de una previsión de crecimiento que sea realista se basa en el hecho de que la previsión que había fijado inicialmente el Gobierno para 2012 superaba el 2%, mientras que la mayor parte de los bancos internacionales, auguran que España puede decrecer entre tres y siete décimas el próximo año. Los presidentes regionales también desconocen cuál es la política retributiva que se debe aplicar a los funcionarios.