La Policía Nacional tiene ya en su poder el informe sobre las anomalías del terreno de Majaloba elaborado por el geofísico Luis Avial, que escaneó durante tres días más de 15.000 metros cuadrados de esta parcela con la ayuda de un georradar y una cámara fotográfica geotérmica. El informe apunta la existencia de dos posibles puntos calientes en el maizal que se levanta junto a la carretera A-8002, que conecta Sevilla con La Rinconada. Por el momento, la Policía no tiene previsto iniciar las excavaciones de manera inmediata y esperará a valorar por completo el estudio del georradar antes de comenzar una nueva búsqueda sobre el terreno.

Es en esta finca ubicada en el término municipal de La Rinconada donde Miguel Carcaño asegura que arrojó, en compañía de su hermano, el cuerpo de Marta del Castillo. Según esta versión, la séptima que ofrece el asesino, habría sido su hermano, Francisco Javier Delgado, quien mató a la adolescente golpeándole en la cabeza con la culata de una pistola. Luego, Carcaño y Delgado habrían llevado el cadáver hasta una zanja ya existente en la finca Majaloba, a la que habrían vuelto la noche siguiente para cubrir los restos con cal viva.

Este detalle, de ser cierto, podría ser muy importante para la investigación, ya que podría encajar con una de las conclusiones del informe del georradar. El estudio sobre el terreno habría detectado una irregularidad en el modo en que crece la vegetación en un punto del maizal. El hecho de que se hubiera utilizado cal viva, o cualquier otro compuesto químico, provocaría que el crecimiento del maíz fuera menor que el del resto de la plantación, según indicó ayer el geofísico Luis Avial en distintas cadenas de televisión.

El experto no quiso entrar en demasiados detalles técnicos sobre el informe, pero sí destacó que, una vez más, el caso de Marta del Castillo presentaría unas circunstancias inéditas en la historia criminal española. De dar por buena la versión de Carcaño, se produciría un doble efecto. Por un lado, la existencia de restos humanos bajo la plantación aceleraría el crecimiento de la misma, por lo que el maíz debería estar más alto en el punto que hubiera sido arrojado el cadáver que en el resto de la finca.

Sin embargo, el hecho de que se utilizara un compuesto químico provocaría el efecto contrario, es decir, restaría vigor a la planta. Este efecto sobre la vegetación se produciría siempre que los huesos y la cal estuvieran a una profundidad somera, de como máximo dos metros. Si los restos fueron arrojados a una zanja mucho más profunda no provocarían ninguna irregularidad en el maizal.

Esta anomalía en la vegetación es uno de los dos puntos calientes señalados por el especialista en su informe sobre Majaloba. El otro indicaría la existencia bajo el maizal de una zanja o trinchera de una profundidad de uno o dos metros. El Grupo de Menores (Grume) de la Policía Nacional, que ha llevado la investigación desde el principio, está ya valorando el informe técnico, si bien en principio se descarta una excavación de manera inminente.

La Policía está trabajando paralelamente buscando información sobre las posibles zanjas de la zona, contactando con testigos y agricultores que trabajan en la finca para conocer cuándo se hicieron, si estaban abiertas en enero de 2009 y cómo ha cambiado el terreno desde entonces. Los agentes también están a la espera de que se recoja la cosecha de maíz plantada sobre la zona, por lo que la excavación, si finalmente procede, podría realizarse no antes de otoño.

Luis Avial se sigue mostrando convencido de que la pista que sigue la Policía en Majaloba es buena y de que los restos mortales de Marta del Castillo podrían estar sepultados en esta finca. Pese a ello, también quiso lanzar un mensaje de prudencia y explicó que no ha querido hablar con los padres de la joven desaparecida para no crearles demasiadas ilusiones. Avial, propietario de la empresa Cóndor Georradar, que colabora habitualmente y de manera gratuita con las Fuerzas de Seguridad y que ha trabajado antes en casos como el de los niños de Córdoba y el de Publio Cordón, peinó más de 15.000 metros cuadrados con el georradar durante los días 15, 16 y 17 de julio.

Este aparato emite una serie de ondas que conformarían un mapa del terreno, de manera que después esa información puede analizarse en un laboratorio y se puede conocer las alteraciones que ha sufrido el subsuelo. Además, desde el helicóptero de la Policía Nacional se tomaron una serie de fotografías de la parcela con una cámara térmica. Con esta técnica se intenta hacer un estudio de la temperatura del terreno y las posibles variaciones de la misma, de manera que un cambio de temperatura marcaría una alteración del subsuelo. Avial se mostró muy satisfecho del resultado de estas fotografías, que se tomaron en una jornada de mucho calor, por lo que los contrastes podrían ser mayores.

El geofísico alabó el trabajo de la Policía Nacional, del que dijo que permanece en la sombra pero que debería conocerse cuando finalice la investigación. De hecho, esta nueva línea de trabajo es fruto de la insistencia de los agentes del Grume, que se desplazaron varias veces a la prisión de Morón de la Frontera para mantener diversas entrevistas con Miguel Carcaño. Después de varias visitas, el asesino confeso ofreció esta nueva versión, en una declaración tomada durante seis horas y escrita a mano por los agentes en la prisión.

Carcaño ha sido excarcelado ya cuatro veces para que indique a los policías el lugar exacto en el que arrojó con su hermano el cadáver de Marta del Castillo. En ninguna de sus salidas se ha mostrado preciso, ya que asegura que las dos veces fue en su moto y se limitó a seguir el coche que conducía su hermano, en cuyo maletero iba el cadáver de la joven. El hecho de que fuera de noche y lloviera el día de la desaparición le hicieron fijarse sólo en las luces del coche y no reparó en los detalles exactos del lugar al que arrojaron el cadáver. De ahí que el georradar haya peinado un área de 15.000 metros cuadrados y no se haya acotado algo más la búsqueda.

Pese a la credibilidad que la Policía otorga a esta nueva línea de investigación, ni el juez ni el fiscal del caso creen una sola palabra de Carcaño. El juez de Instrucción 4 de Sevilla, Francisco de Asís Molina, archivó la nueva causa contra Francisco Javier Delgado después de que éste fuera imputado por homicidio por la Policía.