La tolerancia de la población con la corrupción de los representantes políticos es muy baja, aunque si se colocan en primera persona dentro de una situación como la posibilidad de utilizar tarjetas black, la cosa cambia levemente. Un 34% de los andaluces realizaría gastos con esa forma de pago si su empresa se la facilitara.

La encuesta realizada telefónicamente (y de forma aleatoria) a 400 personas, mayores de 18 años, de toda Andalucía, entre el 13 y el 17 de octubre, revela que la población es mucho más inflexible con los partidos políticos en el asunto de la corrupción, pues el 65% opina que ante la presencia de indicios o denuncias de conducta ilícita por parte de cualquier representante público, el partido debería expulsarlo directamente. Solo el 10% cree que hay que esperar a una sentencia que confirme el delito. El 23% apuesta por apartar al representante de su cargo, pero no expulsarlo hasta que haya sentencia.

Estos datos se extraen de un estudio sobre tendencias sociales realizado por el profesor del departamento de Sociología de la Universidad de Granada, en colaboración con una empresa granadina.

La encuesta ha dedicado un apartado a la nueva y emergente formación política Podemos. El 80% de los andaluces (según se extrapola del estudio) cree que el grupo liderado por Pablo Iglesias debería presentarse a las elecciones. Pero esto no significa que obtuvieran el apoyo de toda esa gente, pues un 64% considera que las propuestas de Podemos son "irrealizables" y no está preparado para gobernar. Es más, casi la mitad de los encuestados desconoce cuáles son esas propuestas.

Tampoco llega al 50% el número de personas que cree que se produciría un cambio en el sistema político, económico y social de este país si Podemos llegara al poder. En todo caso, la mayor parte de la población (un 64%) no estaría de acuerdo con un posible pacto de esta formación con PSOE e IU.

La desconfianza general hacia los partidos políticos también afecta a Podemos, pues solo uno de cada cuatro encuestados mantiene la esperanza de que formaciones como ésta, Vox o Ciudadanos supongan un cambio en la concepción política tradicional impuesta a lo largo de la democracia por PSOE, PP e IU.

El estudio también incluye otros temas de actualidad como el proceso independentista de Cataluña. El 69% considera que no debería haber debate al respecto, ya que Cataluña es parte de España. No obstante, el 58% sería partidario de buscar una solución política a la situación. Un 20% cree que debería haber un referéndum en toda España.

Respecto al ébola, la encuesta revela preocupación por la alta probabilidad que la mayor parte de la población considera que hay de que se produzca un brote. Además, los andaluces no confían en que el sistema y el personal sanitario esté preparado para afrontar una contingencia así. Un 66% cree que los hospitales no tienen suficientes medios ni organización para un brote de ébola.