Los padres de Marta del Castillo, la joven que fue asesinada el 24 de enero de 2009, han decidido cerrar la plataforma que lleva su nombre tras la decisión del Gobierno de instaurar la prisión permanente revisable. La familia quiere "volver a la normalidad" y centrarse en la atención a sus otras dos hijas, las hermanas de Marta, sin dejar la búsqueda del cuerpo y la lucha en los tribunales contra la sentencia de la Audiencia de Sevilla que absolvió a tres de los cuatro acusados y sólo condenó a Miguel Carcaño a 20 años por el asesinato de la joven.

El padre de Marta, Antonio del Castillo, que este lunes anunció en su twitter personal esta decisión, explicó que la clausura se debe a que la plataforma "ha cumplido su cometido", puesto que se abrió para la recogida de firmas, el cambio de las leyes y la coordinación de las movilizaciones y el contacto con los medios de comunicación.

Del Castillo agradeció la labor desarrollada estos años por la coordinadora de la plataforma, María Antonia López y su hija Susana, y añadió que a partir de ahora quieren dedicarse "en silencio y con total dedicación a la búsqueda del cuerpo" de Marta.

El cierre de la plataforma no significa que la familia vaya a dejar de seguir buscando el cuerpo de Marta ni que abandonen los recursos planteados contra las distintas resoluciones judiciales dictadas en relación con el asesinato de su hija. Antonio del Castillo precisó, a este respecto, que han decidido llevar al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, la decisión del Tribunal Supremo de rechazar el recurso de la familia para que en este caso no se enjuiciaran por separado a los adultos y al entonces menor Francisco Javier García Marín, el Cuco, que fue condenado a tres años de internamiento en un centro cerrado como encubridor del crimen de Marta. El padre de Marta explicó que en mayo pasado el Tribunal Supremo decidió no admitir a trámite el recurso en el que solicitaban un único juicio, un dictamen que fue apoyado por la Fiscalía General del Estado, y precisó que tras esta decisión "la única vía" que les quedaba era recurrir al tribunal europeo.

La familia sigue a la espera de que el Supremo se pronuncie sobre la abolución de los tres acusados adultos.