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Alejandro zapata. expresidente del san fernando cd

"La situación era insostenible, he llegado a temer por mi salud"

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Para Alejandro Zapata, la presidencia del San Fernando CD ya es historia.

Para Alejandro Zapata, la presidencia del San Fernando CD ya es historia. / román ríos

Todo en esta vida tiene un porqué. Los aficionados del San Fernando necesitaban saber el porqué de la marcha de Alejandro Zapata de la noche a la mañana y, con él, la ida de toda su junta directiva. Era importante conocer los motivos que han derivado a que el club de La Isla ofrezca la crisis que actualmente padece. Cuando recibimos a Alejandro Zapata todavía tiene secuelas de días duros y de momentos comprometidos. No está para muchas fiestas y no extiende mucho sus contestaciones, quizás pensando que en su abandono pesan mucho más los motivos personales que los que dicta el corazón.

-¿Qué ha pasado?

-La situación llegó a ser insostenible. La presión de todas partes no me dejaba ver el camino. Tenía problemas personales, muchas puertas cerradas y todo se nubló hasta el punto de que llegué a temer seriamente por mi salud. Un día dije "hasta aquí llegué" porque anímicamente ya no podía aguantar más.

-Pero, ¿por parte de quién?

-Pues mire usted, ha llegado un momento en que me encontraba prácticamente solo, sin apoyo, criticado, casi sin recursos y encima sufriendo, y uno se plantea muchas cosas, como por ejemplo si merece la pena. Le vuelvo a repetir que la situación era insostenible y que me llegaban comentarios que este o aquel ayudarían al equipo si yo no estuviese. Se unió todo en contra y lo mejor que podía pasar es que me marchase.

-Vayamos por partes. ¿Comenzó todo con la llegada del grupo inversor?

-Eso es para analizarlo. Una vez terminó la temporada pasada, se reunió conmigo este grupo para invertir en el club y hacer un equipo grande. Ellos vinieron con promesas de un espónsor fuerte para financiar la temporada, de una campaña de socios acorde con lo que era el San Fernando, con una gestión limpia y transparente, y con una dirección deportiva. Todo parecía maravilloso.

-¿Parecía?

-Sí. Porque fueron pasando los días y todo fue cambiando. En un principio el espónsor no llegaba, los días pasaban y las cosas no eran como las habían vendido. De hecho, llegó un momento en que no había nada en el club y había muchas cosas mal hechas, por lo que tuve que tomar la determinación de dejar de contar con sus servicios, en un principio con el del director deportivo y posteriormente con los otros dos.

-¿Fue ahí donde comenzaron los problemas graves?

-Fue entonces cuando comencé a quedarme muy solo y los problemas me acuciaban. Había comentarios de todos los tipos, reuniones, insultos y acusaciones que a uno le llegaban a desesperar. Fueron días muy malos, sin dormir, sin acudir prácticamente a mi trabajo, solamente San Fernando.

-¿Y no pidió ayuda?

-Pues claro. Y se comprometió conmigo gente que después dio un paso atrás, que escurrió el bulto. Yo no podía ir en solitario con una banderita luchando contra viento y marea. Eso comenzó a afectarme, tanto en mi vida privada, con mi familia, como en la personal e incluso en la económica, y entonces decidí marcharme.

-¿Y cómo deja el club?

-Bueno, la situación es complicada, eso no lo vamos a negar. Pero no hasta el punto de las barbaridades que uno escucha o te comentan. Las deudas más importantes que existen son los reconocimientos de la mismas a las aportaciones al capital que han realizado Camilo Puerto, Juan Guerrero y la empresa de representantes Taktica, que dejaron el dinero para cerrar la temporada pasada. Lo demás todo es viable, negociable. Pero lo que está claro es que para que la temporada llegue a buen puerto hace falta una inyección económica que yo tenía muy complicado conseguir. Hace falta un inversor porque con la masa social que cuenta el club es complicado y, por supuesto, la ayuda municipal.

-¿Solo son esas deudas?

-Hay restos que son de temporadas anteriores, como es el caso del jugador Selu, donde la Mutua reclama un dinero importante, hay deuda con Autocares Rico, con Benisser, que era la marca de ropa que vestía antes al equipo... , pero el problema principal es cómo afrontar la actual. Para arreglar esos problemas hace falta mucho tiempo, y yo carezco de él, y sobre todo mucha ayuda y mucha gente implicada, y también carecía de ello.

Zapata termina la conversación. No quiere guardar rencor a nadie. Solo desea descansar de tanto revés y centrarse en su vida, su familia y su trabajo, para que la presidencia no sea otra cosa que pasado.

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