El Zenit San Petersburgo se proclamó ayer campeón de la Liga rusa a falta de dos jornadas para el fin del campeonato tras imponerse 5-0 al modesto Rostov y después de que el CSKA Moscú empatara 1-1 ante el Spartak Nalchik y perdiera así todas las esperanzas de hacerse con el título.

El serbio Danko Lazovic marcó el primer tanto, de penalti, en el minuto 40, seguido de sendos goles de Serguei Semak (75'), el ex sevillista Alexandr Kerzhakov (82') y dos aciertos a portería de Alexandr Bujarov (89', 90').

Con su victoria en casa sobre el Rostov y el empate del CSKA Moscú en el campo del Spartak Nalchik, el Zenit San Petersburgo conquista su segundo título de liga en la historia del club.

El equipo, entrenado por el técnico italiano Luciano Spalletti, que fichó en diciembre pasado por el club de la antigua capital imperial, ganó por primera vez la Liga rusa en 2007, éxito que fue secundado por la UEFA y la Supercopa europea en 2008.

La víspera, el Rubin Kazan, campeón de la liga rusa en 2008 y 2009, dijo adiós al título tras empatar en casa del Dinamo Moscú (2-2), aunque conserva intactas sus posibilidades de clasificarse para la Liga de Campeones.

No es el caso del Zenit, patrocinado por la corporación gasística Gazprom, que cayó en la fase previa de la Liga de Campeones ante el Auxerre. Así, después de 28 jornadas, el Zenit San Petersburgo, que invirtió esta temporada más de 50 millones de euros en fichajes, se coloca en cabeza con 66 puntos, seguido del CSKA con 58 y el Rubín Kazan con 56.

"El resultado de este campeonato ha estado en nuestras manos durante cuatro meses. Precisamente el deseo de concluir el campeonato, de poner fin a esta carrera cuanto antes, aumentaba aún más la presión sobre el equipo. En una situación así hay que ser maduro e inteligente para controlar las emociones, porque en cada partido piensas que todo puede acabar. La diferencia (entre los dos tiempos) hay que buscarla en el aspecto psicológico. Fue resultado de las emociones, de la presión que sufría el equipo. En la segunda parte, cuando logramos el resultado, comenzamos a jugar tranquilamente y a meter bonitos goles", declaró Spalletti al canal NTV-Plus.