GP España 2024 Más de 250 denuncias en El Puerto en las primeras horas de la Motorada 2024

En tránsito

eduardo / jordá

Magistrados independientes

SUPONGO que no hay nada ilegal en que un magistrado que ha militado en el PP presida el Tribunal Constitucional, pero como noticia no dice nada bueno a favor de nuestro país. En primer lugar, porque es bastante vergonzoso que un partido político proponga a un militante (o ex militante) para presidir un órgano judicial tan importante como el Tribunal Constitucional. Y en segundo lugar, porque tampoco dice nada bueno a favor del magistrado que ha militado en un partido político y que aun así ha aceptado el nombramiento.

Ya sé -insisto- que no hay nada ilegal en ser magistrado y a la vez militante de un partido político, pero me pregunto si eso es una conducta ejemplar o siquiera respetable. El Tribunal Constitucional no es una cofradía de Semana Santa ni una Federación Provincial de Balonmano. Es el órgano que tiene la responsabilidad de dictaminar si determinadas leyes se ajustan o no a la Constitución vigente, así que sus dictámenes aprueban o rechazan unos asuntos tan importantes como el Estatuto de Cataluña o el matrimonio homosexual. En cierta forma, el Tribunal Constitucional es la única garantía de que el Estado va a actuar con ecuanimidad en determinados temas especialmente complejos. Y si ya es una vergüenza que los partidos políticos, en función de sus mayorías parlamentarias, se repartan los puestos del Tribunal Constitucional, más vergonzoso aún es que se nombre presidente a un antiguo militante de un determinado partido. Porque eso demuestra que los partidos políticos se han convertido en virus que no son capaces de sobrevivir sin parasitar todas las instituciones del país, y ya sabemos que ningún partido se fía de alguien que no sea adicto o simpatizante, o dicho de otro modo, de alguien que no sea "manejable". Y me temo que esto es una deshonra morrocotuda tanto para los partidos políticos como para las personalidades que aceptan ser "manejables".

Ahora mismo estoy viendo a una abubilla que vuela feliz sobre unas matas de jara, mientras la persiguen dos urracas azules que parecen haberse hecho amigas suyas y que siempre vuelan por las mismas zonas del campo. No creo que tengan intereses comunes, sino tan sólo el mismo deseo de disfrutar y de volar a sus anchas. Y me pregunto por qué hay determinados magistrados y políticos que no son capaces de comportarse con la misma libertad que demuestran tener estas aves tan humildes. Sería bueno saberlo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios