¿Qué regalo hacerle a los profesores y cuánto dinero poner?

Y llega el dilema de todos los años. Finalizan los exámenes, se empieza a distribuir por el whatsapp del grupo de la clase de nuestros hijos el diseño de los disfraces que tienen que llevar para el baile del fin de curso así como recomendaciones sobre dónde pueden encontrar la tela, los colores e incluso el nombre y teléfono de un costurero o costurera que se lo pueda hacer si la agenda no les permite autoconfeccionarlo.

Y ahora toca plantearse otra cuestión, que para muchos padres y madres se vaticina crucial y que, para otros, se basa sólo en aportar el dinero que hay que poner o enviarlo directamente por bizum, según se diga en el citado whatsapp de la clase, sin tan siquiera preocuparse sobre si es un solo regalo o si son varios o si es un viaje o una sesión de relax en el hotel Spa Cádiz Plaza.

Y surge otra cuestión de vital importancia. Si hacerle un regalo de manera individual o si replegarse al grupo de la clase. Y algo más, ¿a cuánto asciende la cantidad correcta para medir en nivel de agradecimiento a la atención prestada por el profesor o la profesora a nuestros hijos en cumplimiento de su deber profesional?

Según indican en algunas web de compras online de detalles del tipo que habitualmente reciben los docentes, en Cádiz cada niño o niña suele aportar entre 4 y 10 euros para el regalo de fin de curso.

Algunos padres seguirán de cerca el uso que se hará de ese dinero, mientras que otros muchos desconectarán del todo de esta cuestión y lo dejarán en manos de la madre o del padre que, de manera voluntaria, ha expresado su deseo de encargarse de la compra de este obsequio del profe.

¿Y qué comprarles?

En cuanto al qué comprarles, no hay que olvidarse de aquellos padres que se esmeran bastante más de lo habitual y que pueden regalar unas entradas para el profesor o profesora y para su pareja de una espectáculo del Falla con cierta resonancia o bien unos vales para un spa para intentar relajar los ánimos después de un curso intenso.

A partir de ahí, el abanico es amplio. Muchos de los padres optan por gastar el dinero recaudado en comprar para el docente de sus hijos varios regalos totalmente despersonalizados y sin apenas sintonía entre unos y otros. A su vez los hay que optan por la habitual foto enmarcada con todos los niños del curso que suele pasar a engrosar una larga colección que suelen ir a parar al armario sin fondo de las casas.

De todas maneras, es justo decir que la eclosión de las nuevas tecnologías se lo han puesto algo más fácil a los encargados de recaudar y comprar estos regalos para los profes, ya que, por poco dinero, se puede personalizar ya casi todo y lo mismo se puede regalar una taza con un eslogan más o menos simpático hasta un cojín con una foto de los pequeños junto a sus profesores o profesoras.

Pero bueno, lo que vale es la voluntad, que es lo que los maestros suelen agradecer.

Amazon, sin ir más lejos, ofrece un espacio en su tienda online dedicado de manera exclusiva a recomendar posibles regalos para los profesores de sus hijos e hijas.

La web de Wanapix también dedica un espacio especial para este tipo de detalles.