La Catedral de Cádiz es el primer punto de refugio de las cofradías en Semana Santa, principalmente por la amplitud de sus accesos, que no requiere de maniobra alguna a la hora de entrar y salir los pasos procesionales, al contrario que en la inmensa mayoría de las iglesias del centro. Por eso, dentro de la previsión de posibles incidencias a cuenta de la lluvia, el epicentro del trabajo de las hermandades de manera individual y del Consejo en general es el interior de la Catedral.

Allí tendrán cabida todos los integrantes de un cortejo -bandas incluido- en caso de que el mal tiempo obligue a suspender una procesión; ya sea de manera temporal, hasta que pase la nube o la cofradía decida regresar a su templo, o una suspensión de la salida a la espera de un traslado que se haría en días posteriores.

Según ha establecido el Cabildo Catedral de común acuerdo con el Consejo, la girola del principal templo de la ciudad será el espacio reservado para aquellos pasos procesionales que tengan que refugiarse a cuenta de la lluvia.

Esta decisión hay que ponerla en relación con lo ya anunciado hace unos meses de que este año las cofradías no transitarán por la totalidad de la Catedral, sino que la estación se acortará por el crucero (delante del altar mayor) encarando directamente Arquitecto Acero. Una decisión adoptada por los canónigos siguiendo el consejo técnico de los arquitectos debido al mal estado que presenta el suelo en la zona de la girola.

Por ello, con los cortejos entrando hacia la izquierda transitando por la primera mitad de esa nave lateral hasta el crucero para salir por Arquitecto Acero, se considera que la girola es el espacio adecuado para que los pasos puedan quedarse varios días si se suspende la procesión hasta su regreso al templo.

En el plan de agua elaborado para este templo se contempla también un espacio reservado a las bandas de música, que otros años se han visto obligadas a permanecer a la intemperie en plena calle a pesar de la lluvia. Y del mismo modo se incorpora un protocolo específico para la recogida de los menores de edad en caso de que la hermandad decida suspender la procesión al llegar a la Catedral.

Siguen los malos pronósticos

Al hilo de estos planes en Catedral por si la lluvia sorprende a una o varias cofradías en la calle, los pronósticos para el arranque de la Semana Santa sigue sin ser favorables. O cuanto menos, sin dar una mínima tranquilidad respecto al tiempo que hará durante los días de procesiones.

De hecho, las malas previsiones se han adelantando incluso, contemplando ahora una posibilidad de precipitaciones para el Viernes de Dolores y el Sábado de Pasión que antes no estaban previstas.Un 10% de posibilidades refleja la Aemet para cada uno de esos días de vísperas, elevando el porcentaje al 25% al llegar el Domingo de Ramos; y de ahí al 45% en lo que al Lunes Santo se refiere. Pronósticos que pondrían en solfa el inicio de la Semana Santa.

Por su parte, la web eltiempo.es lleva la posibilidad de lluvias en la tarde–noche del Viernes del Dolores hasta el 60%, pasando al 20% durante el Sábado de Pasión. Para el Domingo de Ramos establece las posibilidades de precipitaciones en un 30% durante la tarde y la noche, bajando este riesgo hasta el 10% en la noche del Lunes Santo. Y a partir de ahí, el riesgo de mal tiempo iría en aumento conforme avanza la jornada, hasta el punto de reflejar un 30%, un 60% y un 100% para Martes, Miércoles y Jueves y Viernes Santo, respectivamente.