Semana Santa

El Ecce-Homo hizo historia pese a la lluvia

  • Los cofrades tuvieron que acortar el recorrido de su primera estación de penitencia como hermandad

La Hermandad del Ecce-Homo de Puerto Real estaba llamada a escribir una página en la historia de la Semana Santa local y ni siquiera el mal tiempo logró estropearlo. La del Miércoles Santo fue una tarde de tensión, mirando al cielo, pero la joven cofradía lo tuvo claro, se encomendó a Nuestra Señora de la Salud, y salieron a la calle para lucir estrenos.

Bendición de la nueva Cruz de Guía de la hermandad Bendición de la nueva Cruz de Guía de la hermandad

Bendición de la nueva Cruz de Guía de la hermandad / C.P. (Puerto Real)

El primero nada más abrirse las puertas de María Auxiliadora, por donde asomaba una nueva cruz de guía, obra de Juan Carlos García. Le seguían los hermanos nazarenos, alrededor de 20, que también estrenaban el hábito que el pasado año no pusieron vestir al suspenderse el Vía Crucis, esa vez sí, a causa de la lluvia.

Nazarenos de la Hermandad del Ecce-Homo Nazarenos de la Hermandad del Ecce-Homo

Nazarenos de la Hermandad del Ecce-Homo / C.P. (Puerto Real)

Mirando al cielo, los hermanos sacaban a la calle el paso del Ecce-Homo dirigido por primera vez por José María Vidal, y cargado por una nueva cuadrilla de costaleros. Los cofrades empezaban a desfilar por el barrio que siempre les acogió desde que en 2010 realizaran su primera salida como Agrupación Parroquial, dirigiéndose a la calle Real, momento en el que, por primera vez en la historia de la joven cofradía, salían del barrio para iniciar su primera estación de penitencia por las calles del centro de la ciudad.

Un hermano enciende las velas del paso del Ecce-Homo Un hermano enciende las velas del paso del Ecce-Homo

Un hermano enciende las velas del paso del Ecce-Homo / C.P. (Puerto Real)

Lo hacían acompañados de la Banda de Cornetas y Tambores Nuestra Señora de los Ángeles, de Sevilla. Se adentraban en la calle de la Plaza (donde recibió una saeta y una petalada), Cruz Verde y San José, hasta alcanzar la calle Ancha. Allí se vivió uno de los momentos más emotivos de la noche, los hermanos del Ecce-Homo, por primera vez, frente a la Iglesia Prioral de San Sebastián.

Saeta desde un balcón en la calle De la Plaza Saeta desde un balcón en la calle De la Plaza

Saeta desde un balcón en la calle De la Plaza / C.P. (Puerto Real)

Fueron muchos los momentos en los que la hermandad más reciente de la Villa tuvo que contener la emoción. Escenas para el recuerdo que quedarán grabadas para siempre. Ecce-Homo hacía historia, pero no con la grandeza que soñaron. Tras su estación de penitencia en San Sebastián, la lluvia apretó y los hermanos acortaron su recorrido. Enfilaron la calle Real hasta la parroquia María Auxiliadora sin llegar a pasar por la carrera oficial. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios