La situación sanitaria actual, a falta de 79 días para el Domingo de Ramos, provoca una gran incertidumbre y muchas dudas respecto a la organización y desarrollo de la Semana Santa. Y en busca de la adopción de las medidas que se consideren más positivas para garantizar la seguridad sanitaria tanto de los participantes de las salidas procesionales como del público espectador, las cofradías están a la espera de un protocolo de actuaciones, una guía de medidas que elaborará la Consejería de Salud y que, por tanto, tendrían vigor para todas las hermandades de Andalucía.

Los consejos de hermandades de las capitales andaluzas están a la espera de este documento cuyo primer borrador estaría ultimando estos días la administración andaluza; todo ello teniendo en cuenta lo imprevisible que a día de hoy es el escenario que caracterizará a la región dentro de dos meses.

En cualquier caso, ese protocolo servirá para dar una mayor orientación a los responsables tanto de los consejos de hermandades, como de los distintos ayuntamientos y las propias cofradías sobre cómo organizar los cortejos y cómo plantar en la calle las procesiones en la cada vez más cercana Semana Santa. Con este objetivo, precisamente, mantienen en Cádiz el Ayuntamiento y el Consejo una mesa de trabajo que la pasada semana planteaba posibles medidas como la ampliación de la carrera oficial, el aforamiento de la calle Santiago, la instalación de purificadores de aire debajo de los pasos o la solicitud del certificado de vacunación a los integrantes de los cortejos procesionales, entre otras muchas medidas que se están planteando a falta de definir el escenario definitivo que regirá la Semana Santa.

Trabajo similar se está haciendo, por ejemplo, en Almería, que hace unos días emitía una nota respecto a las medidas que en la actualidad se recomiendan por parte de las autoridades municipales y los estamentos cofradieros. A diferencia de Cádiz, no se contempla por ahora la realización de test de antígenos, “que deberían limitarse a aquellos casos que presenten sintomatología compatible con la Covid”; y sí se establece la exigencia del uso “en todo momento” de la mascarilla FFP2 y la presentación del certificado de vacucaciones en cada convocatoria de las cuadrillas de costaleros.

Y al igual que ha ocurrido en la capital gaditana, se descarta esa posibilidad avanzada hace días por Juan Marín de buscar recorridos más amplios, al no ser comparables “por muchos motivos los desarrollos de nuestras estaciones de penitencia con, por ejemplo, una cabalgata de Reyes”. “Sí se baraja, en función de la situación epidemiológica que exista, solicitar el posible aforamiento de algunas calles”, añaden en Almería, coincidiendo en este caso con la planificación que a día de hoy se baraja también en Cádiz de cara al incierto regreso de las cofradías a las calles esta próxima Semana Santa.