El Señor de La Cena presidirá un altar en la calle Nueva el domingo de Corpus. La hermandad ha confirmado este miércoles que mantendrá su presencia en la fiesta eucarística como viene haciendo desde el año 2000 cuando por primera vez saliera a la calle en Corpus para presidir un altar, con ocasión aquel año del Gran Jubileo de la Iglesia.

La Cena había solicitado este año, de manera excepcional por la coincidencia de fechas con el Carnaval, que su imagen titular formara parte del cortejo de la procesión de Corpus, para mantener así la presencia del Señor en este día en las calles de la ciudad. Pero finalmente el obispo diocesano, Rafael Zornoza, ha rechazado esta posibilidad, tal y como ha informado la hermandad en un comunicado y como ya adelantaron hace unos días el deán del Cabildo Catedral, Ricardo Jiménez Merlo, y el presidente del Consejo de Hermandades, Juan Carlos Jurado, durante la presentación del cartel y programación de esta fiesta.

En paralelo a la decisión comunicada por el Cabildo Catedral, informa la corporación que tiene "la confirmación de que podremos contar con un dispositivo de seguridad para el altar efímero" por parte del Ayuntamiento. Y por eso ha decidido que el Señor del Milagro presida un altar en la calle Nueva para el paso de la procesión, repitiendo así el emplazamiento de los últimos años.

Será a las 8.00 horas del domingo 19 de junio cuando la hermandad dominicana traslade al Señor de La Cena hasta la calle Nueva, con el acompañamiento musical de la camerata de la agrupación musical Polillas. Y tras la procesión del Corpus, al mediodía de ese domingo, el Señor regresará a Santo Domingo, ya con el acompañamiento de la agrupación musical completa. Todo ello con Jorge Gómez como capataz del paso.

"Esta Hermandad Sacramental ha sido la primera -hace ya algunos meses- que manifestó su interés e insistencia en participar en la Solemnidad del Corpus Christi del presente año 2022, muy especialmente al ser la primera procesión con Jesús Sacramentado tras haber recuperado el culto público una vez levantadas las restricciones que la autoridad sanitaria había impuesto, dándose la circunstancia de que la Hermandad no se ha visto ni amparada ni escuchada por la mayoría de los organismos que participan en la organización de la fiesta, al menos en la manera que hubiera sido deseable", traslada la corporación, que muestra su agradecimiento a la Concejalía de Fiestas "por la ayuda prestada sin la cual no sería posible para la  hermandad afrontar la instalación del altar con la dignidad requerida".