Varias generaciones de isleños aprendieron a montar y se pasearon en las bicicletas que salieron de este señero establecimento, que ahora acaba de echar el cierre. Con él, La Isla se despide de otro comercio histórico del centro. Ruceco, la tienda de bicicletas y recambios de automóviles de la calle Real, ha cerrado sus puertas tras más de medio siglo atendiendo a los clientes.

Un cartel avisa desde principios de la semana del cese de la actividad de este negocio de toda la vida emplazado en las proximidades de la plaza del Rey. El establecimiento ha estado abierto durante la friolera de 55 años, según el dato que aporta Francisco Martínez, la persona que ha sido su propietario durante la última década y media. Eso sí, aclara, trabajando en Ruceco, vinculado al negocio, ha estado prácticamente toda su vida laboral y toda la trayectoria del local: más de 40 años.

La situación del comercio tradicional –apunta– se ha vuelto insoportable en el centro. "Ha sido imposible seguir adelante", constata al referirse a una realidad que muchos llevan tiempo lamentando y que ha llevado ya a la desaparición de no pocos locales comerciales con bastante solera. Unos han podido aguantar hasta la jubilación de sus propietarios sobrellevando la crisis, aunque otros no han tenido tanta suerte.

De hecho, Ruceco es un nombre más de una larga lista de establecimientos históricos de La Isla que han echado el cierre a lo largo de los últimos años. La calle Real es, además, una de las zonas que se ha visto más afectadas por el declive del comercio tradicional. No falta quien achaca lo ocurrido a las obras del tranvía y a la desaparición del tráfico rodado de la que ha sido siempre la arteria principal de la ciudad. Otros apuntan a la crisis, a los cambios en los hábitos de consumo de los clientes, a la imposibilidad de competir con las grandes superficies y las marcas estrella... En realidad, hay de todo un poco.