La residencia de la Cruz Roja, donde se localiza el foco más preocupante de coronavirus que existe por ahora en San Fernando con 46 usuarios contagiados, recibió ayer los test rápidos que la Junta de Andalucía ha empezado a repartir entre distintos centros de mayores para frenar el avance del Covid-19. 

Dichos test rápidos se realizarán a la totalidad de los usuarios y profesionales que trabajan en el centro para detectar posibles nuevos contagios por coronavirus y proceder de inmediato a su aislamiento y tratamiento de forma que se consiga interrumpir la cadena de transmisión del virus.

Ayer, concretamente, se realizaron más de 60 de estos test entre todos los usuarios del centro, incluidos aquellos que no presentaban síntomas. Hoy se están haciendo estas pruebas a toda la plantilla, integrada por más de un centenar de personas. 

En la residencia isleña, con 151 usuarios, se habían realizado con anterioridad -desde que se conoció el primer positivo el pasado 23 de marzo- hasta 89 pruebas de coronavirus habiéndose llegado a detectar hasta 46 usuarios contagiados, de los que 4 permanecen ingresados en el hospital Puerta del Mar. Se contabilizan también hasta 3 fallecimientos por el Covid-19. 

Entre los 110 trabajadores de la residencia se había realizado también antes de recibir los test rápidos hasta 13 pruebas del coronavirus dando como resultado 4 positivos. Hoy, precisamente, se han empezado a realizar estos test a todo el personal. 

La prueba, ha afirmado el director de la residencia, Antonio Montero, se va a realizar "al cien por cien" de las personas que están en el centro, ya sean trabajadores o usuarios.