La Policía Local ha presentado 276 denuncias por saltarse el estado de alarma durante las tres primeras semanas de confinamiento, bien contra personas que se encontraban en la calle sin justificación alguna o bien porque se habían saltado las excepcionales restricciones de circulación que están en vigor desde mediados de marzo.

Este dato, tras 25 días de confinamiento en casa, supone una media de 11 denuncias diarias, lo que -insisten- es una cifra razonablemente baja para una ciudad de casi cien mil habitantes. Es decir, que incide  y pone de manifiesto el buen comportamiento de los isleños. 

Así lo afirman quienes en estos días se encargan de hacer cumplir estas medidas excepcionales puestas en marcha por la crisis del coronavirus, que reiteran el "buen comportamiento y civismo" con el que los isleños sobrellevan el confinamiento y la normalidad con la que, en términos génerales, se han asumido estas circunstancias extraordinarias. Aunque, claro está, siempre hay excepciones a la regla. 

Según la Policía Local, la mayoría de las denuncias -un total de 165- se han presentado contra personas que pese a ser informadas de las medidas del estado de alarma se negaron a cumplir con la indicación de los agentes y desobedecieron a la autoridad. Otras 102 denuncias se realizaron contra ciudadanos que no respetaron las restricciones de circulación.

También, en este mismo periodo, se han presentado cuatro denuncias por tenencia y consumo de estupefacientes en la vía pública a pesar del estado de alarma y otras dos por consumo de alcohol en la calle. 

Otro sorprendente hecho derivado del confinamiento que obliga a la gente a quedarse en casa y de las particulares celebraciones con las que se intenta hacer frente a esta situación excepcional es el elevado número de intervenciones que ha registrado la Policía Local en estas tres semanas por cuestiones de orden público: ruido, música a un alto volumen y voces. En ningún caso, precisa, se ha llegado a presentar denuncia por estas razones, pero se ha tenido que actuar hasta en 59 avisos que se han dado en este sentido durante el estado de alarma. 

Los agentes también han realizado también en torno a 50 servicios humanitarios -sobre todo respondiendo a peticiones de personas mayores y dependientes- y han supervisado el reparto de alimentos de Cáritas, así como el funcionamiento de los comedores escolares y el cumplimiento de las normas en supermercados y zonas de comercio. 

Hay que destacar que las 276 denuncias presentadas suponen menos del 40% de las personas que los agentes han tenido que parar en la calle durante el estado de alarma. De hecho, durante las tres primeras semanas de confinamiento se han identificado a un total de 748 personas que en el 63% de los casos justificaron su presencia en la vía pública por motivos laborales o por acudir a realizar compras a tiendas de alimentación o a la farmacia. En otros casos, los isleños identificados fueron advertidos de que no podían estar en la calle y acataron las instrucciones sin que hubiera necesidad de interponer denuncia contra ellos.