Una nueva protesta en la barriada Río San Pedro ha vuelto a dejar clara la oposición de toda la comunidad educativa de la Escuela Infantil ‘Viento del Sur’ al recorte de líneas en el centro educativo. La de este viernes, la quinta cacerolada, ha sido la de mayor participación, ya que se ha unido la mayor parte de la comunidad educativa de la barriada. De hecho, la protesta no ha tenido como escenario la Escuela Infantil, sino que han recorrido gran parte de las calles de la barriada, teniendo como punto de partida el colegio de Primaria Río San Pedro.

Mucho ruido a primera hora de la mañana, antes de la entrada de los escolares a sus respectivos centros, que querían hacer llegar hasta la delegación de Educación. Allí, el pasado miércoles, la presidenta de la AMPA, acompañada por representantes de la comunidad educativa y de padres y madres de futuros alumnos del centro, entregó un escrito al delegado de Educación, Miguel Andreu, en el que manifestaban su malestar ante la situación que se les avecina de cara al curso que viene.

Quieren que se mantengan las dos líneas de infantil de tres años para el curso escolar 2022/2023, y lo piden sumando casi 2000 firmas de apoyo. Recuerdan que el centro es la única escuela infantil de la barriada y, además de atender a los propios vecinos del barrio, también acoge a los hijos e hijas de trabajadores de industrias de la zona así como de las Universidades, siendo un centro con gran movilidad y matriculación durante todo el año.

La EEI Viento del Sur destaca por su calidad y excelencia educativa. Es ‘Centro Mentor’ y ‘Centro Telémaco’, y fue la primera ‘Comunidad de Aprendizaje’ de la provincia de Cádiz. Otro dato que la comunidad educativa destaca es que se encuentra en una zona de compensación educativa. “El colegio de Primaria y el Instituto de Secundaria están catalogados  como Centros de Compensatoria, no incluyendo a Escuela Viento del Sur por ser una etapa de educación no obligatoria”, manifiestan los padres y madres.

Las familias no entienden cómo se puede suprimir una línea del centro si las solicitudes iniciales para el próximo curso ya superan los 25 alumnos fijados como ratio máxima.  Apuntan que “se han solicitado como primera opción 26 plazas y otras cuatro como segunda opción, algunos de ellos con la necesidad de conseguir este colegio por asuntos personales”.  Además, adelantan que existen familias con interés en incorporarse al Centro durante la segunda vuelta. “Sin embargo, la realidad es que, a día de hoy, se ha dejado fuera a un alumno vecino del propio barrio, lo que le obligaría a tener que desplazarse a otro centro que, aunque pertenezca a Puerto Real, está fuera de su núcleo poblacional  y a una distancia mínima de 4 kilómetros”.

En la protesta de este viernes también han participado los padres y madres de futuros alumnos, que han expuesto su preocupación por los problemas que conllevaría una mayor ratio de alumnos, tanto en el espacio físico como en el nivel de atención del alumnado por parte del profesorado, viéndose especialmente perjudicados aquellos que precisen de necesidades espaciales (NEAE).

Por todo ello, la comunidad educativa al completo mantiene las esperanzas de que la Delegación Territorial de Educación y Deporte en Cádiz refleje un “criterio científico-educativo con sensibilidad social, para que la interpretación de la normativa y su ejecución sea en pro de la educación de los alumnos y del bienestar de las familias”.