El cambio de temperatura y el tiempo libre que muchas familias tienen ahora debido al confinamiento, ha hecho que muchas personas aprovechen los largos días de encierro para hacer limpieza de armarios y seleccionar las prendas que se van a usar en este temporada y la que no. En este cribado, que se repite cada cambio de temporada, es mucha la ropa de la que nos deshacemos, por lo que la ONG Madre Coraje ha emprendido una campaña para que no acabe en la basura.

La entidad se dedica a recoger esas prendas, ya sea en los contenedores habilitados o en sus sedes, pero el servicio ahora no está funcionando. Sin embargo, no están siendo pocos los ciudadanos que "abandonan" bolsas llenas de ropa a las puertas de las distintas sedes de la ONG, por lo que han pedido que se abandone esa práctica, que acaba llenando las calles de suciedad, contribuyendo a la propagación del virus e impidiendo el reciclaje de estas.

La entidad solicita a quienes tengan previsto deshacerse de algunas prendas, que las mantengan en casa hasta que se recupere el servicio de la ONG, que permite su reciclaje y mantener los proyectos que realizan en comunidades empobrecidas de España, Perú o Mozambique.