La lluvia provocó el aplazamiento de algunas de las actividades previstas para la celebración del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemoraba este 10 de octubre. Otras se trasladaron de la Plaza de Jesús al patio interior de la Casa Consistorial y contaron con la participación de representantes políticos, profesionales de la salud mental y ciudadanos que, a título individual, contaron sus experiencias para "sentirse bien".

Y es que este año la Delegación de Salud, que organiza los actos junto con el Hospital de Puerto Real y la Asociación de Familiares de Enfermos Mentales (Apfem), centró las jornadas en la prevención de las enfermedades mentales y en mejorar nuestro estado anímico.

"Es una realidad que hay un malestar emocional en la mayoría de la población pero hay fórmulas sencillas a las que podemos recurrir para mejorar ese malestar", explicó la concejala de Salud, María Merello, al inicio del acto en el que la ciudadanía, principalmente mujeres, tomó la palabra.

"Relacionarse con otras personas y ayudar a los demás tiene una repercusión positiva en nuestro estado de ánimo", dijo una de las participantes, comenzando el relato de un conjunto de medidas sencillas que cualquiera puede adaptar a su estilo de vida y que pueden ayudarnos a sentirnos bien.

También se contó con la participación del doctor Eulalio Valmisa, director de la Unidad de Gestión Clínica de Salud Mental del Hospital de Puerto Real. El psiquiatra agradeció la apuesta del Ayuntamiento de Puerto Real por la conmemoración de este día y destacó que "cada vez mas administraciones públicas se están sumando y nos encanta ver que crece esa sensibilidad".

Valmisa también centró su intervención en aquello que podemos hacer como individuos y como sociedad para prevenir las enfermedades metales con una serie de actuaciones que han demostrado evidencias científicas. "No lo digo yo, lo dice la Organización Mundial de la Salud", matizó.

"Es fundamental que las personas conecten, no por redes sociales sino cara a cara, a través de vecindarios, asociaciones o en los colegios. Seguir aprendiendo, a cualquier edad, incluso en la etapa adulta, es otra recomendación". De las relaciones personales destacó que "sonreír a alguien, abrazar y dar lo mejor de nosotros es excelente no sólo para la persona que lo hace sino también para quien lo recibe", dijo Valmisa apoyado por los testimonios de voluntarios de ONG que participaron en el encuentro.

La práctica deportiva, mejor si es en grupo, y " no quedarnos en lo que hemos fracasado sino en lo que podemos dar, es otra clave de la protección de la salud mental", explicó.