Que se vayan, pero pronto

DESPUÉS de la lamentable derrota ante el Cacereño han quedado muy malas sensaciones. El Cádiz ha terminado la primera vuelta a siete puntos del líder, el sorprendente La Hoya Lorca. Y menos mal que el Albacete también patinó ante la Balona. Era muy importante ganar el partido del viernes, y eso ha sido lo que deja más sensación de frustración. No sólo perder después de marcar tres goles en Carranza (y adelantarse tres veces), sino la manera de entregar un partido que se pudo ganar. A final de Liga, esos tres puntos pueden pesar. Excepto que La Hoya Lorca se hunda estrepitosamente en la segunda vuelta, o excepto que el Cádiz haga una segunda vuelta apabullante, ya parece utópico que acabe como líder. Y se debe recordar que los equipos clasificados en segundo, tercer y cuarto lugar juegan las eliminatorias, pero tienen pocas posibilidades de ascenso.

Dos líderes suben directamente, por definición. Y de los dos que pierden la primera eliminatoria, suele ascender otro, beneficiado porque entra en segunda ronda y juega las vueltas en casa. En la temporada 2011-2012, el Cádiz que había sido líder, no ascendió, pero se quedó a un solo penalti. Ese año sólo subieron dos primeros (Castilla y Mirandés). La temporada pasada volvieron a ascender tres (Alavés, Tenerife y Jaén). Quiere decir que lo normal es que sólo ascienda uno de los 12 clubes que juegan la fase de ascenso sin ser líder. Y que los otros 11 se queden un año más en Segunda B. Mientras que sólo hay un líder (o como máximo dos) que no suben. La diferencia es obvia, no hace falta aprobar los informes PISA.

El Cádiz, a día de hoy, tiene muy complicado terminar como líder. La Hoya Lorca sólo ha perdido un partido en toda la primera vuelta. Si el Cádiz le hubiera ganado al Cacereño estaría ahora a cuatro puntos del líder y a uno del Albacete. Pero como no fue así, se ve obligado a realizar una segunda vuelta sin fallos. Eso será imposible si no hay refuerzos. Y esto nos lleva a la esencia del problema: es imprescindible que el traspaso de poderes se realice con urgencia.

Gaucci debe salir del Cádiz, y cuanto antes será mejor para todos, incluso para él. Debe entender que su tiempo aquí ha terminado. Sinergy no sólo ha perdido la propiedad del club por la venta de las acciones de Muñoz. Ha sido descalificada por los administradores concursales. Carece de credibilidad. Por eso, lo mejor es que asuman la realidad. En ese sentido, ha sido más noble la actitud de Florentino Manzano.

Empeñarse en dar más coba, con personajes como la señora Gina, es más triste que cómico. Por lo demás, nadie apoya a Gaucci, excepto cuatro amiguetes o alguna peñita que le debe favores. Tampoco es necesario que se haga más leña con él, sino que negocie su salida con sentido común.

Mantener la rocambolesca situación actual es perjudicial para todos. Enero será un mes difícil, en el que el Cádiz debe ganar todos los partidos para irse arriba. Hasta ahora, no se ha visto a un Cádiz capaz de ganar cuatro partidos seguidos, por lo que se requiere el máximo esfuerzo y concentración. 2014 va a ser un año decisivo. Debemos tenerlo claro: si no hay ascenso, el Cádiz será inviable.