encuentros en la academia

Leopoldo Jiménez Ruiz

Esfuerzo contra la crisis

SEMANAS antes de las elecciones autonómicas y municipales escribía en estas mismas páginas lo necesario de fortalecer la Esperanza contra el desencanto y finalizaba mi escrito solicitando a los gobernantes educar para aprender, conocer y dominar el futuro, o lo que entendía como educar para la esperanza.

Hoy, aquí y ahora, pasadoS los comicios generales, quisiera dedicarles los párrafos siguientes al esfuerzo que será necesario para revitalizar nuestro entorno y, por ende, sofocar la crisis -en todos los sentidos-, en la que estamos inmersos.

Por cierto, tenga bien presente el lector desde este momento que entendemos por esfuerzo lo que de forma sencilla y clara define el diccionario de la RAE: "Empleo enérgico del vigor o actividad del ánimo, para conseguir una cosa venciendo dificultades, ánimo, vigor, brío. Empleo de elementos costosos en la consecución de algún fin" .

En el lenguaje común y coloquial empleamos el término "voluntad" como sinónimo de "esfuerzo" ; a quien es capaz de hacer un gran esfuerzo se le considera dotado de una fuerte voluntad. Sin embargo, esto es solo verdad a medias, ya que el esfuerzo solo es necesario al principio, mientras se forma la verdadera voluntad, pero cuando se está en posesión de una poderosa voluntad, realizar acciones que antes eran muy costosas se convierte en algo mas fácil.

Precisamente el estar dispuesto a mantener mientras sea necesario ese esfuerzo inicial por algo que nos conviene, que es necesario aunque no nos guste, constituye la fase mas costosa y ardua de la formación de la voluntad, que no es otra cosa que la repetición de actos sin escatimar esfuerzos.

Y esta gestación de valores deberá ser -mucho antes que la implementación de reformas estructurales -, la primera labor que deberán tomar los nuevos gestores del país. Será mucho mas importante una educación y entrenamiento del ser humano en el esfuerzo que el seguir haciendo, por ejemplo, que los alumnos se les "enseñe" Educación para la Ciudadanía.

Termino como empecé este escrito: Donde no existe la esperanza, no puede existir el esfuerzo.

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