Cultura

"Trabajar desde el silencio es trabajar con el ruido más fuerte"

  • La artista sevillana nacida en Aarau (Suiza) presenta esta tarde en el Centro Flamenco de La Merced, a las siete y media, '30 decibelios', un título que hace alusión a su limitada capacidad auditiva

Hablamos por email. Mª Ángeles aún no ha llegado a Cádiz. Con agrado, dice en su misiva, contesta a las preguntas que le planteo. Me disgusta el medio. Teclado. Ordenador. Bytes. Parece un poco frío. Comienzo a leer su historia. Ocurre el incendio. Las emociones viajan. Mª Ángeles Narváez La niña de los cupones es sorda desde los 6 años. El antibiótico que tomó le mató el nervio auditivo pero no consiguió acabar con la entereza, la fuerza y el talento de la joven sevillana que se convirtió en la primera persona sorda que finalizó los estudios de danza española (en el Conservatorio hispalense) y en la primera bailaora y cantaora en lenguaje de signos. Hoy, estará en Cádiz. En La Merced.

-Participa por primera vez en el festival Cádiz en Danza, aunque ya ha pasado por muchos festivales de renombre, ¿cómo se siente?

-Me siento ilusionada y emocionada por participar en el Festival Cádiz en Danza. Cádiz es una ciudad a la que quiero muchísimo. Mis vacaciones las paso siempre, desde que nací, en Conil de la Frontera, que es donde tenemos nuestra casa familiar frente al mar.

-¿Cómo se trabaja desde el silencio?

-Trabajar desde el silencio y con el silencio es trabajar con el ruido más fuerte, que es el silencio. En mi caso, es complicado de explicar, ya que no se nace sabiendo pero me defiendo sintiendo y viendo. He trabajado mucho con un solo audífono la velocidad de procesos de información por estímulo auditivo, memorizando las letras del cante e intentando calzarlas para saber por dónde van y llevármelas a mi corazón para interpretarlas con pasión, tanto al cante como al baile en lenguaje de signos. Después también intervienen factores como la destreza manual, la memoria inmediata y la atención. Estas son las características básicas de mis experiencias y de mi forma de ser y de estar.

-Pionera en el cante y baile en lenguaje de signos, pionera en graduarse en danza española siendo una persona sorda, ¿qué barreras más le quedan por romper?.

-Pues cuando me venga la siguiente te lo diré (ríe, escribiendo jajaja).

-Hábleme de 30 decibelios, supongo que es un montaje, me parece que su primera creación, muy personal, ¿no es así?

-Sí. 30 Decibelios hace alusión a lo que me queda en mi oído izquierdo donde llevo un audífono, porque mi oído derecho es nulo. En este montaje me expreso profundamente y de manera muy personal.

-En el espectáculo participan Javier Leal, a la guitarra, El Bola, al cante, y Paki del Río, a las palmas ¿cómo ha sido el trabajo con ellos?

-Muy bueno. Lo preparamos para la Bienal de Flamenco de Sevilla y estar con ellos ha sido muy importante porque todos hemos sabido entendernos y sobrellevar las diferentes situaciones.

-Lleva muchos años sobre los escenarios, ¿recuerda la primera vez que se subió a uno?

-Sí. Tenía 6 años cuando me subí a un escenario por primera vez durante los festivales de mi primera academia de baile, la de mi barrio, la de Paco Palacios. Me encantaban los trajes de flamenca, eso lo recuerdo bien. Y así seguí, hasta hoy.

-Los pioneros, los rompedores, en cualquier disciplina siempre se encuentran con más obstáculos que los demás, ¿usted lo notó en el Conservatorio o al principio de su carrera profesional?

-He tenido momentos extraños y no sabía por qué. Cuando lo descubrí me di cuenta de que tenía que ser más fuerte, que tenía que luchar, que tenía que tirarme al río. Reuní todos esos ingredientes y esa fuerza y llegué hasta aquí. La mayor barrera es la que tiene el incapacitado para entender lo diferente.

-Transmitir es la clave del flamenco, ¿el lenguaje de signos es un canal igualmente válido que otros para conseguir este objetivo?

-Pues sí ya que mi objetivo es transmitir toda mi sensibilidad y expresión a la lengua de los signos cantando y bailando.

-¿Como artista se siente igual de valorada que otro intérprete sin discapacidad?

-Eso no se puede medir. Mi valoración ha sido positiva y muy interesante para el público. Yo me valoro como soy y no por quien soy. El público que va a verte quiere que le emocione lo que ve independientemente de si eres sorda o no. Hay artistas que transmiten menos que yo y no tienen ninguna discapacidad. Mi caso es una diversidad funcional, no una discapacidad. Discapacitados somos todos. Todos somos sordos y ciegos.

-¿Cuál es el secreto para hacer lo que hace además de talento? ¿Memoria? ¿Voluntad? ¿Trabajo?

-Exprimir tu mente como un limón.

-Vende usted cupones, ensaya, trabaja en sus espectáculos, ¿cómo se organiza el día?

-Por las mañanas vendo cupones de la Once, por las tardes ensayo y bailo, y durante la semana contacto con mi oficina para preparar los espectáculos en los sitios donde me llaman. Ellos se encargan de la fecha, el avión, el proceso administrativo... Siempre procuro que las actuaciones sean en fines de semana y cuando no es posible mi empresa, la Once, me apoya y me permite coger días para viajar a los distintos lugares. Me queda por actuar en Venezuela, Francia, Madrid y La Coruña con mi nuevo espectáculo Yo soy del aire.

-Hábleme de sus proyectos futuros y de sus sueños.

-Mi futuro es Venezuela, mi próximo destino , y todos esos lugares de los que te he hablado antes. De momento lo estoy pasando bien y cumplo mis sueños. No sé qué más pedir, mi sueño siempre ha sido un escenario y lo voy cumpliendo. También me gustaría empezar a preparar un tercer espectáculo titulado A los ojos de la sociedad, y también me gustaría hacer un anuncio de televisión con mi traje de cupones de la Once. Mi sueño es que la magia dure siempre.

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