Suspense en la Brasil de Bolsonaro

Algunas novelas, las buenas, trascienden los géneros y son difíciles de clasificar. Nos pasó con Don Winslow y su Trilogía del Cártel y nos ha vuelto a ocurrir con Joe Thomas y su cuarteto de São Paulo, que acaba de ser completada con una obra coral que alcanza la excelencia. Hablamos de Brazilian Psycho, un thriller épico, político, adictivo y vertiginoso que a través de una extensa y variopinta galería de personajes –ficticios y reales– nos atrapa sin remisión en una historia salvaje.

Brazilian Psycho arranca en octubre de 2018, en vísperas de la victoria electoral de Bolsonaro. Allí vemos la brutalidad que emplean unos jóvenes con un homosexual pero también la policial en una chica a la que dejan desnuda en una celda sin comida ni agua durante 24 hora solo por haber pintado un grafiti contra el político ultraderechista.

Ese es el punto de partida, pero la historia da un salto temporal para volver a 2003, precisamente cuando Lula da Silva, la gran esperanza en acabar con las desigualdades de la enorme Brasil, llega al poder. En esos días los inspectores Mário Leme y Ricardo Lisboa investigan la muerte del director de un prestigioso colegio británcio al que acude la élite del país.

Mientras tanto, Ray Marx, ex agente de la CIA, ahora consultor y conseguidor freelance, llega a la ciudad con la misión de anticiparse a los cambios políticos que se avecinan en Brasil y que preocupan a la empresa Capital SP, uno de los mayores conglomerados financieros de Sudamérica.

Renata, una joven abogada de la firma, decide abrir un nuevo gabinete de asistencia jurídica sin ánimo de lucro en Paraisópolis, una de las mayores favelas de la ciudad. Pero quienes mandan en la favela no dejan entrar a cualquiera en su territorio y encargan su vigilancia a Rafa y Franguinho, dos chiquillos que simbolizan ese anhelo tan humano de subir en la pirámide alimenticia.

Poco a poco la vida de todos estos personajes irán cruzándose en una historia con muchas aristas en la que cada uno tiene un papel asignado y representa algo en una sociedad paulista complicada, una ciudad extraordinaria y fascinante donde el autor británico vivió una década y que ha retratado con esa maestría reservada a los elegidos.

Quienes disfrutaron con las historias de James Ellroy o Don Winslow, ambientadas en Los Ángeles o la frontera entre México y EEUU, no pueden perderse este cuarteto de São Paulo, un libro que, a pesar de sus casi 600 páginas, se lee de un trago largo, de un tirón, porque cerrar sus páginas y abandonar a esos personajes en permanente combustión es una tarea imposible. Una novela única con un trasfondo muy real de un país tan grande como complejo.

La saga: El comisario Lascano es perro viejo pero aún muerde

Ingresado en El Hogar, una residencia geriátrica de lujo, el comisario Lascano se encuentra en sus horas más bajas: allí mismo acaba de cometerse un crimen del que resulta ser el principal sospechoso y que ni él mismo, debido a sus cada vez más frecuentes fallos de memoria, está seguro de no haber perpetrado. Aun así, Lascano siente la llamada del deber y acepta colaborar con la policía en una investigación que bien podría llevarlo a la cárcel. Sin embargo, la búsqueda del culpable irá revelando que no son pocos aquellos con motivos más que sobrados para haber eliminado a la víctima…

Por esta novela de Ernesto Mallo y que lleva por título Perro viejo—logrado homenaje a los clásicos del whodunnit— desfila una singular galería de personajes que se interrogan sobre la vejez, la política, la justicia o la falta de ella, y las relaciones entre poder y dinero. También la amistad, el deseo y los amores perdidos están presentes en este particular universo donde los recuerdos y la imaginación se entremezclan constantemente para alumbrar esa ficción que llamamos memoria: nunca recordamos las cosas como fueron, las recordamos como somos. Otro estupendo título de la editorial Siruela, que posee una colección negra que nunca defrauda a sus lectores.