Manuel de Rivero ofrece la última charla del Aula Americana en el Colegio de Arquitectos
Tras el acto, que es a las 20.30, se inaugura la muestra de Alina Granados, 'Diario de Navegación'
El Colegio de Arquitectos de Cádiz acoge esta noche, a las 20.30 horas, la conferencia de clausura del Ciclo Aula Americana, que correrá a cargo del arquitecto peruano Manuel de Rivero del estudio 51-1. Tras su intervención, se inaugurará la exposicón Diario de Navegación, de la artista galleta Alina Granados.
Estudio 51-1, es un estudio de arquitectura ubicado en Lima (Perú), liderado por los arquitectos César Becerra, Fernando Puente Arnao y Manuel de Rivero. Desde su fundación en el 2005, han trabajado en decenas de proyectos que han merecido premios y reconocimientos en Perú, así como publicaciones en medios internacionales como Dwell, Mark, A+U, PLOT, Elle Decor Japan, C3, AV Proyectos, etc. En 2007, la revista 2G Dossier los incluyó entre las 30 oficinas emergentes de Iberoamérica y, en 2013, fueron seleccionados en la III Bienal de Arquitectura Latinoamericana de Pamplona. Es una de las oficinas que conforman el colectivo Supersudaca (www.supersudaca.org), que cuenta, además de en Perú, con bases en Argentina, Chile, Uruguay, Curacao, Bélgica y Holanda.
Entre sus principales proyectos se encuentran la agencia Multivacaciones; los edificios de vivienda Infinium Golf y Chiclayo 862; la Feria Gastronómica Mistura; los restaurantes IK y Astrid&Gastón Casa Moreyra; los hoteles NM Lima y Gran Cóndor Quito; la casas Serpiente y Pachamanca y la participación en el pabellón peruano de la 13ª Bienal de Venecia. Aunque su mayor éxito hasta el momento ha sido el primer premio obtenido en el concurso internacional para la extensión del Museo de Arte Moderno de Medellín en Colombia (actualmente en construcción).
Por su parte, Alina Granados rinde homenaje en la exposición que hoy se inaugura en Arquitectos al Mar del Norte, ese mar salvaje y natural del que casi se presiente su olor y sabor. Es una obra que activa los sentidos. Una pintura realizada con las manos, sin usar el pincel, en una suerte de relación muy íntima de la pintura con su cuerpo: la fuerza de sus brazos es la que posibilita que sus cuadros sean así y no de otra manera. No hay ningún instrumento que entorpezca su labor creativa, que se interponga entre su cuerpo y el lienzo.
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