Cultura

Jerez se vuelca con los Príncipes y aplaude a 25 grandes de la Cultura

  • Don Felipe y Doña Letizia presiden la entrega de estos galardones en los Museos de La Atalaya en una cita que causó mucha expectación y en la que el discurso de Tricicle rompió con toda solemnidad

Sus Altezas Reales los Príncipes  de Asturias entregaron ayer en los jerezanos Museos de La Atalaya las Medallas de Oro al Mérito de las Bellas Artes 2009, que otorga el Ministerio de Cultura. Una primera visita de Don Felipe y Doña Letizia a la ciudad que ha generado mucha expectación y que para los jerezanos ha sido “todo un honor”, aseguró la alcaldesa, Pilar Sánchez, quien recibió a los Príncipes junto a la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde; el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y el consejero de Cultura, Paulino Plata.

El heredero de la Corona española abrió el acto y dio la palabra a la alcaldesa que saludó y dio la bienvenida a los célebres invitados y felicitó de antemano a los premiados. Pilar Sánchez agradeció “la acertada elección de Jerez por parte de los Príncipes y del Ministerio de Cultura para la celebración de este solemne acto en esta ciudad del arte” e invitó a Don Felipe y a Doña Letizia “a que no tarden en volver a Jerez”.  

Acto seguido se hizo entrega de las Medallas a los galardonados:  la Duquesa de Alba, Julio Iglesias en cuyo nombre recogió el premio su hija Chabeli; el grupo Tricicle, integrado por los catalanes Joan Gracia, Paco Mir y Carles Sans; el bailaor Joaquín Cortés; los artesanos zapateros Castañer; el matador de toros Luis Francisco Esplá; Radio 3 de RNE que recogió su directora, Lara López; el actor y director Ángel Pavlovsky; la especialista en efectos especiales Reyes Abades; la artista visual Eugenia Balcells; la historietista e ilustradora Pura Campos; la escritora e ilustradora de libros Roser Capdevila; el actor y cantante lírico de zarzuela Rafael Castejón; el productor teatral y escenógrafo Andrea D’Odorico; el fotógrafo y diseñador gráfico Juan Gatti; el editor y presidente del Grupo Anaya, José Manuel Gómez y Rodríguez de Pumarada; el escritor y experto en comunicación Román Gubern; el cantante Kiko Veneno; el pintor El Hortelano; la editora Beatriz de Moura; la fotógrafa Isabel Muñoz y la profesora de interpretación y actriz Cristina Rota. La actriz Rosa María Sardá, la escritora de libros y canciones infantiles María Elena Walsh y la bailarina Ana Laguna también fueron galardonadas con las Medallas, aunque no pudieron estar presentes en el acto.

El grupo Tricicle se encargó de romper la formalidad del acto con un hilarante discurso por parte de uno de sus miembros, Paco Mir, en nombre de todos los galardonados. “3 de noviembre: un mes con nueve letras, múltiplo de 3. Año 2010: 2 + 1 = 3. En La Atalaya, en calle Cervantes número 3. Un escritor (Cervantes) con tres extremidades...”. Tras hacer una curiosa correlación de acontecimientos “inquietantes” ligados al número 3, en alusión obviamente a Tricicle, que precisamente al ser tres tuvieron el honor de dar las gracias en nombre de todos, Paco Mir resumió el sentimiento de sorpresa entre los galardonados: “Unos porque no se lo esperaban y otros porque hacía tanto tiempo que lo esperan que ya no lo esperaban”. “Como a los humoristas sólo nos conceden premios póstumos lo primero que hicimos fue hacernos un chequeo por si alguien del Ministerio sabía algo que nosotros no sabíamos”, señaló con su aguda mordacidad. “Los premiados no sólo estamos agradecidos sino que queremos demostrarlo creando un gran espectáculo que, sugerimos, podría verse en la ceremonia del año que viene. Ya está todo hablado. Estamos hablando de algo grande, con todo tipo de trucos escénicos”. Y desgranó Mir la participación que cada uno de los premiados tendría en ese hipotético espectáculo, con papel destacado para la Duquesa de Alba, “encargada de adelantarnos parte del presupuesto en su calidad de mecenas, y lo más importante, tenemos un torero que es Luis Francisco Esplá encargado de lidiar con esos monstruos que son las Administraciones”. En su desternillante discurso de agradecimiento, Mir no bromeó al aseverar que “el trabajo del artista es tan duro e ingrato como el de un corredor de fondo, un trabajo en el que a menudo es más fácil ser conocido que darse a conocer. Muchas gracias por reconocer nuestro diminuto granito de arena al mundo del arte”.

La ministra de Cultura, que hizo un repaso por las virtudes de cada uno de los premiados, destacó de ellos que son “uno de los indicadores más significativos de la ‘felicidad interior bruta’ de España. Vuestra sensibilidad, vuestro talento, audacia e imaginación aspiran, como este Gobierno en la medida que puede, a la plenitud de los ciudadanos”.

Un repaso por los valores artísticos que han hecho a los premiados merecedores de estos galardones que también hizo José Antonio Griñán que subrayó el honor que supone para Andalucía “convertirse en la comunidad autónoma que más veces ha acogido este evento lo que se une a nuestra vocación cultural y desde el convencimiento de que nada hay más acogedor que la cultura”.

El Príncipe de Asturias cerró el acto de entrega de las Medallas y apuntó que sentía, entre bromas,  “romper la magia del 3” por ser en este caso el cuarto en ofrecer su discurso. Dijo que esta cita le permite “compartir con todos vosotros algunas reflexiones sobre ese impulso artístico que anima el trabajo y la creatividad de las personas e instituciones distinguidas”. El heredero felicitó a todos los galardonados y les agradeció además “el regalo que para todos supone vuestra vida y obra”. “Hay que agradecer además –añadió– a quienes apoyan la creación artística. La labor de mecenazgo no es sólo una muestra indudable  de altruismo y generosidad, sino que resulta fundamental para promover el conocimiento de la obra de arte, el fomento de la labor creativa y el estímulo de mentes despiertas y emprendedoras, particularmente entre los más jóvenes”.

Hay que destacar que la Orquesta de Jerez ‘Beigbeder’, con la intervención de su director Archil Pochjua, fue la encargada de poner ‘la banda sonora’ a este solemne y a la vez distendido acto de entrega de Medallas, que queda ya en un apartado ilustre de la memoria de los jerezanos.

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