La Casa del Obispo sigue cerrada en medio del eterno y cansino cruce de alegaciones, recursos y sentencias entre Ayuntamiento de Cádiz y la empresa adjudicataria. Si hace ya casi medio año -el pasado marzo- el pleno del Consistorio decidió por unanimidad recuperar este importante enclave arqueológico que en diciembre sumará cinco años cerrado, las llaves ni han sido entregadas ni se les espera, al menos de momento.

Así lo confirman fuentes municipales, que han comunicado que tras aprobarse la extinción del derecho de ocupación del inmueble por parte de Monumentos Alavista, que es la empresa adjudicataria, esta misma empresa ha decidido una vez más alegar, por lo que no será hasta el próximo mes de septiembre cuando de nuevo se lleve a pleno la desestimación de dicha alegación. Se desconoce cuántas vueltas de tuercas más se le puede dar a una historia, la de la Casa del Obispo, cuya dilatación en los tiempos no hacen más que ir en su detrimento y la del patrimonio en esta ciudad.

La cuestión es que el importante paso que ya se emprendió hace unos meses permitiría supuestamente la recuperación del yacimiento, tal y como expresó Martín Vila. En cambio, el desbloqueo de esta situación y la recuperación de Casa del Obispo no termina de llegar, tal y como anunció el Ayuntamiento, cuyo próximo paso a seguir sería sacar a licitación su gestión.

En julio del año pasado ya se acudió al Consejo Consultivo de la Junta de Andalucía, que dio la razón al Ayuntamiento de Cádiz en su decisión de resolver la concesión del conjunto alegando “infracciones graves del pliego administrativo”. Lo hizo después de que la empresa presentara una vez más alegaciones a la decisión de la junta de gobierno local, tomada en marzo del año anterior, de iniciar el eterno rescate de la concesión. La historia continúa casi igual, como en El día de la marmota, a la espera de un digno punto y a parte.