La familia de Fuad Kaddur Tamin, un preso melillense que murió en la cárcel de Puerto III atrapado por una puerta automática de su celda, rechazó la versión oficial de los hechos dada por la dirección del centro y afirmó que "la asfixia no se pudo producir con la puerta".

En declaraciones a Europa Press, la portavoz de la familia, Yamina Kaddur, aseguró además que el recluso de la cárcel situada en El Puerto había pedido por escrito protección al centro al sentirse amenazado por un funcionario de prisiones que le habría dicho "no saldrás vivo de aquí". Yamina Kaddur, tía del interno fallecido el pasado día 25, ha solicitado que se esclarezcan las "causas reales" de la muerte del joven de 31 años, al que quedaban sólo nueves meses para ser puesto en libertad.

La portavoz familiar señaló que tanto el preso, de nacionalidad española, como una amiga inglesa que había conocido durante los días libres que disfrutaba, habían presentado denuncias ante la dirección del centro contra un funcionario de prisiones que supuestamente le habría amenazado y solicitado protección "porque temía por su vida", una protección que nunca le concedieron, matizó.

Ayer, el sindicato de prisiones Acaip respondió a la familia y dijo que no ve "ningún punto oscuro" en la muerte del recluso, y aseguró que "todos lo trabajadores han trabajado de forma profesional y con rapidez para evitar la muerte del interno". Fuentes de Acaip indicaron que el juez instructor dictaminará si la versión oficial es buena.