Será algo más grande que el actual Hespérides y podrá operar tanto en aguas frías del Ártico y el Antártico, como en cálidas (tropicales), así como en superficiales y profundas (deep sea). El Odón de Buen, bautizado así en honor del que se considera fundador de la oceanografía española, será el nuevo buque oceanográfico BOMAG (Multipropósito de Ámbito Global) del IEO-CSIC. El barco –explican desde el CSIC– será la mayor embarcación de la flota española de investigación, con casi 85 metros de eslora, y la más avanzada, ya que permitirá el estudio de ecosistemas, hábitat y fondos marinos en todos los océanos y en profundidades de más de 6.000 metros.

Elaborado desde el Instituto Español de Oceanografía (IEO), el nuevo BOMAG es uno de los proyectos asociados a los fondos de Inversión Territorial Integrada (ITI) de la provincia de Cádiz. De hecho, aunque su construcción se está terminando en los astilleros de Vigo, tanto el puerto de matriculación como el puerto base del buque estarán en Cádiz, “tal y como se definió en el Programa Operativo Plurirregional de España en el que se incluyó el proyecto”, apuntan también desde el CSIC.

Se estima que los trabajos en el Odón de Buen se finalicen este verano y la entrega operativa del buque se realice a lo largo de lo que queda de año. El único pero es que, aun cuando los pliegos especifican que la capital gaditana ejercerá de puerto base, a día de hoy, en el IEO gaditano no cuentan con información al respecto. “Hasta la fecha –indican fuentes relacionadas–, ni CSIC ni IEO han realizado gestión o intervención alguna para acoger la oficina técnica y demás infraestructuras que coordine las actividades de funcionamiento y explotación del buque. Esa dejadez y la falta de comunicación interna sugieren el desvío del destino de la base del buque hacia otra provincia”.

Esta sospecha se ve refrendada por la circunstancia de que las oficinas de gestión del Sarmiento de Gamboa, uno de los últimos buques oceanográficos, llevaban ya dos años en funcionamiento cuando el barco se botó en al año 2006 en Vigo –donde está su puerto base, y donde se encuentra la unidad atlántica de Tecnología Marina del CSIC, uno de los centros encargados de la gestión logística y tecnológica de los buques científicos–. Esto no ha ocurrido en Cádiz. Vigo ejerce, de hecho, como puerto base de numerosos buques de investigación del IEO, circunstancia a la que no es ajena la presencia de la UTM y de los propios astilleros. Además, antes de que el Odón de Buen fuera una realidad, el IEO reclamaba sede viguesa para su próximo oceanográfico.

Como citan los informes de JASPERS, la asesoría europea que se encarga de dar el visto bueno a los proyectos, bajo orientación del IEO se definió Cádiz como base logística y de operaciones del barco por su capacidad para abarcar el Atlántico Sur y las islas Canarias, además del Índico y Pacífico a través del canal de Suez. En nota publicada en el portal de la Comisión Europea, se cita que “en su fase de operaciones, el buque llevará una dotación de veintiséis tripulantes y generará cincuenta puestos de trabajo directos. De estos puestos, quince serán profesionales cualificados con un alto grado de especialización, y el resto serán profesionales del mar con formación”.

80% DE SUBVENCIÓN CON CÁDIZ COMO GANCHO

Los informes anuales del ITI, aclaran que la línea de actuación de la Secretaría General de Investigación en el Proyecto BOMAG contribuye a la ITI de Cádiz y por tanto la provincia gaditana es beneficiaria de los fondos.

Al estar adscrita a Cádiz, una región objetivo por su menor desarrollo, los mecanismos de financiación de los fondos FEDER ascienden al ochenta por ciento de subvención del proyecto:“Emplear Cádiz como justificación para obtener la máxima financiación y luego trasladar la infraestructura a otro contexto geográfico y socioeconómico, supone un menoscabo a los principios del programa”, añaden las mismas fuentes.

El puerto de base del Odón de Buen tiene, condiciones y dotación económica mediante, que estar asociado a Cádiz, aunque no siempre esta sede coincide con el centro de coordinación. Hay casos en los que la oficina que gestiona las actividades de un buque –administración, repuestos, reparaciones, coordinación de tripulación...– no se encuentra en la misma ubicación. Pero “un buque oceanográfico necesita elementos de apoyo logístico y tecnológico muy específicos”, explican los investigadores, que subrayan que cuando se puso en marcha el Sarmiento de Gamboa, dicha sede ya funcionaba, ocupándose del equipamiento científico y la gestión del personal técnico para la realización de las campañas oceanográficas.

La actual “inacción” implica la voluntad de que el buque oceanográfico Odón de Buen “tenga su base operativa real en alguna de las localidades donde se encuentran las actuales sedes de la UTM, Vigo o Barcelona, cuando la actividad y beneficios que genera este tipo de infraestructura tiene que revertir en el territorio que le es asignado”, afirman las voces preocupadas, recordando que el Tribunal de Cuentas ha señalado el proceso de integración del Instituto Español de Oceanografía dentro del CSIC.