Investigan el incendio de un chiringuito en la playa de Zahara de los Atunes

Como ocurre con cualquier siniestro, la Guardia Civil ha iniciado una investigación para determinar el origen del incendio que ha destruido por completo el chiringuito El Arenal, que se ubica junto a otros establecimientos de similares características en un lateral de las murallas del Palacio de Pilas de Zahara de los Atunes.

Los bomberos de Barbate, que fueron alertados por la Policía Local sobre la media noche del lunes al martes, precisaron de casi cinco horas para extinguir las llamas que alcanzaron varios metros de altura al ser un establecimiento de madera, como ha explicado el coordinador de Protección Civil y Bomberos de Barbate, Pedro Ramírez.

Como apoyo a los bomberos barbateños acudieron varias dotaciones del Consorcio Provincial Contraincendios que precisaron de más de 20.000 litros de agua en total para extinguir las llamas, aunque un retén se quedó en la zona al aparecer en la mañana de ayer algunas pequeñas columnas de humo en la zona calcinada.

En un comunicado, el Consorcio de Bomberos explica que fueron efectivos del parque de Conil los que participaron junto a los de Barbate en esta intervención sobre un chiringuito totalmente de madera, de unos 120 metros cuadrados.

En el interior del establecimiento había distintas bombonas de gas que precisaron ser refrescadas y sacadas al exterior. Algunas de ellas llegaron a explosionar durante el incendio, lo que originó grandes cantidades de humo y altos niveles de temperatura, complicando el trabajo para poder controlar el fuego y evitar su propagación a otros establecimientos cercanos que fueron también refrescados para evitar que tomasen temperatura. El local siniestrado estaba cerrado y vacío cuando se produjo el incendio.

Este establecimiento fue noticia el pasado verano, en un operativo emprendido por la Guardia Civil que acabó con más de medio centenar de detenidos, entre ellos un agente de la Guardia Civil de Tarifa y un Policía Local de Barbate, así como varios empresarios del ocio nocturno.

Este chiringuito de Zahara fue uno de los lugares claves de la investigación que arrancó en la primavera de 2014 con el alijo de 500 kilos de hachís en Tarifa.