La Guardia Civil halla 600 kilos de hachís en un lancha apresada en Rota

Dijo que volvía de pescar pero la cubierta de su lancha estaba demasiado limpia. La Guardia Civil sospechó que allí había gato encerrado, y no se equivocó: la Blanca Paloma, nombre de la embarcación intervenida, iba atestada de droga. No estaba obviamente a la vista, sino oculta en un doble fondo de la lancha.

La Blanca Paloma fue interceptada en la costa de Rota, cuando en teoría su dueño retornaba al puerto tras una 'aciaga' jornada de pesca sin lograr captura animal alguna. Así las cosas, los agentes procedieron al abordaje de la embarcación cuando se disponía a entrar en el puerto de Rota.

Los efectivos de la Benemérita trasladaron la lancha a Chipiona. Y allí, en tierra, remolcaron la embarcación hasta el cuartel de la Benemérita, situado enfrente del puerto deportivo chipionero, donde al mediodía de ayer medio docena de agentes procedieron a su registro.

Tras desatornillar los tambuchos, los típicos depósitos de almacenamiento de un barco, los guardias civiles comenzaron a toparse con paquetes y más paquetes que presumiblemente contendrían hachís. En total, según habría acabado confesando el tripulante del Blanca Paloma, transportaba en la lancha, de 5,95 metros de eslora, alrededor de 600 kilogramos de estupefacientes distribuidos a lo largo de todo el doble fondo de la embarcación.