El patio central de la Diputación de Cádiz se inundó en la tarde este jueves de emociones, sentimientos e incluso de lágrimas en la presentación del libro ‘Fragmentos de una memoria a recuperar. Alcalá de los Gazules (1931-1939)’, de Carlos Perales Pizarro.

El dirigente socialista, que falleció hace tres años, ocupaba el cargo de secretario de Memoria Histórica y Democrática del PSOE de Andalucía y era además director del servicio de Memoria Histórica de la Diputación de Cádiz en el momento de su muerte. Su recuerdo llenó un acto en el que se resaltó su calidad humana y su trabajo para recuperar la voz de las víctimas de un periodo negro en la historia de España.

Su repentino fallecimiento dejó inconclusa una obra a la que dieron forma Javier Giráldez y su hijo Pablo y que ha editado el Servicio de Publicaciones de Diputación. Para Javier Giráldez el libro cuenta con “un contenido interesantísimo que nunca había visto la luz”. Se trata, según el historiador, “de la historia de Alcalá de 1931 a 1939, de la República, de personas con nombres y apellidos, de la represión, del golpe militar, de la falange... A Carlos si había algo que le sobrecogía era la mirada de las víctimas”.

Su hijo Pablo explicó como su padre “recopilaba información de ese periodo desde hacía años: cintas de casete con entrevistas a miembros de su familia, a familiares de víctimas, recortes de prensa, archivos... Ha quedado una obra espectacular que esperamos que ahora llegue a la gente”.

Por su parte, la presidenta de la Diputación, Irene García, señaló que el libro es “el mejor testimonio de un buscador de historias. Carlos fue quien puso en marcha el Servicio de Memoria Histórica de esta casa y quien presionó hasta la saciedad y convenció a esta Diputación para liderar la recogida de muestras de ADN”. La dirigente socialista considera que es una “obra terrible por lo que cuenta, pero muy necesaria porque es fundamental que los jóvenes de hoy conozcan lo que pasó, para que no se falsee ni se oculte nuestra historia”.

La publicación consta de 368 páginas, fruto de una intensa investigación de años, con aportaciones fotográficas y documentales y un recuerdo individualizado y humanizador de las víctimas de la represión del bando sublevado.