Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) a una persona de 27 años como por un delito contra la salud pública ya que había instalado una plantación de marihuana  en una vivienda rústica de alquiler y había realizado un enganche ilegal a la red general. 

Según ha informado la Policía en un comunicado, la plantación constaba de más de cuatrocientas plantas de cannabis sativa que contaban con todos los elementos de ventilación, riego y climatización necesarios para favorecer su cultivo y crecimiento. 

La vivienda había sido alquilada por un año y, para no levantar sospechas en el consumo de la luz, el detenido había realizado un enganche a la red general de electricidad por lo que también será investigado como presunto autor de un delito de defraudación de fluido eléctrico. 

Después de realizar varias pesquisas, los agentes comprobaron que en la vivienda no residía nadie y que había sido alquilada por su propietaria a una pareja a finales del 2015. 

Fruto de las gestiones realizadas, los investigadores corroboraron las sospechas de que los arrendatarios de la finca la estaban utilizando para situar en ella la plantación. 

Tras recabar información y confirmar las sospechas, los agentes registraron el chalé y detuvieron al arrendatario, un joven de la localidad sin actividad profesional reconocida que se dedicaba a cultivar plantas de marihuana para después distribuirlas en varias localidades gaditanas. 

Las plantas, algunas de ellas de gran tamaño, se encontraron distribuidas por todas las estancias de la vivienda. 

La plantación, al ser interior, contaba con lámparas repartidas por todo el espacio y con un sistema de ventilación y extracción del aire con filtros para evitar ser descubiertos por el fuerte olor que desprende este cultivo. 

Además, tenían equipos deshumificadores y gran cantidad de fertilizantes y elementos especializados en el tratamiento y manipulación de la droga. 

Una habitación de la casa era utilizada para el secado de las partes de la planta que contienen los principios estupefacientes y contaba con elementos específicos para la manipulación de la sustancia. 

La vivienda alquilada presentaba una serie de instalaciones eléctricas diferentes a las originales de la casa, preparada para el abastecimiento eléctrico de las tres plantaciones, por lo que los investigadores se han puesto en  contacto con la empresa suministradora de energía eléctrica para que valoren la defraudación del fluido eléctrico y se personen en la causa como perjudicados.