El Puerto Accidente de tráfico: vuelca un camión que transportaba placas solares

Patrimonio

El Convento de las Descalzas de Sanlúcar se convertirá a nuevos usos

  • Juan Dobado, responsable de patrimonio de la orden de los Carmelitas, afirma que hay empresas interesadas en explotar la clausura, para hacer rentable el edificio y asegurar su conservación

  • La iglesia y el museo seguirán siendo visitables

Una vista exterior del Convenio de las Carmelitas Descalzas de Sanlúcar.

Una vista exterior del Convenio de las Carmelitas Descalzas de Sanlúcar.

El Convento de las Carmelitas Descalzas de Sanlúcar no cerrará sus puertas en cuanto se marchen estos días las pocas religiosas que viven entre sus centenarios muros. El edificio seguirá teniendo vida, seguirá teniendo algún uso vinculado probablemente a alguna actividad turística y conservará su esencia, según ha anunciado a este medio Juan Dobado, que es fraile carmelita del convento de Santo Ángel de Sevilla y responsable de Patrimonio de la orden.

“Estamos a la espera del proceso de inventariado –para la declaración de BIC– de los bienes que está haciendo la Delegación de Cultura, pero la intención es que se conserve lo mejor posible y destinarlo a algún uso”, explica. De este modo, asegura que con la orden al frente la idea es mantener la iglesia y el museo abiertos como hasta ahora para que sean visitables, “aunque todavía no se sabe la fórmula”. Así, una vez que se concrete el inventario y lo que debe permanecer allí, ya se hablará de los usos de la parte del convento y de la clausura, “pero hay que esperar”.

No obstante, añade, “hay empresas que ya están interesadas en el inmueble porque es un edificio que merece mucho la pena, es muy bonito, tiene un gran valor y se le puede dar un uso con el que se evitaría el deterioro. El cierre sería muy peligroso”, puntualiza.

El nuevo destino, que estaría vinculado a alguna actividad turística, garantizaría su rentabilidad y el mantenimiento de esta joya del arte barroco andaluz levantada en la segunda mitad del siglo XVII, y que cuenta con importantes obras de arte del siglo XVII y XVIII como su conjunto de retablos. También tiene claro el responsable de patrimonio de los Carmelitas Descalzos que ninguna intervención rompería con la esencia del edificio, “pues la iglesia y el museo se conservarían tal cual”, del mismo modo que el nuevo proyecto para los futuros usos también tendría que respetar la singularidad del edificio. “A la orden lo que más le interesa es que el edificio se conserve perfectamente y sabemos que Cultura lo apoya”, informa de las reuniones mantenidas en relación a la marcha de las religiosas de la Comunidad de las Carmelitas Descalzas. “Hemos tenido muy buena sintonía, estamos de acuerdo en todo”, puntualiza Dobado.

Así lo garantiza también la propia Ley de Patrimonio Histórico, al hilo de la reciente incoación a finales del mes de junio del procedimiento para inscribir al Convento de Santa Teresa de Sanlúcar en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural (BIC), que supone el primer paso para declarar BIC tanto al Convento como a todos sus bienes muebles con valor patrimonial (histórico, artístico, documental y bibliográfico) y que, a efectos prácticos, ya disponen de este blindaje.Un paso al frente que llegó gracias al movimiento ciudadano, cuando varias asociaciones culturales del municipio y más de 25 colectivos consiguieron más de 4.360 firmas de apoyo a su iniciativa de solicitar a la Junta de Andalucía la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC).

Su campaña vino arropada por el temor de que con la marcha de las monjas se desvaneciera y se trasladara parte del patrimonio que alberga el coqueto edificio. Como por ejemplo, la carta manuscrita de Santa Teresa y el Cántico Espiritual y Poesías de San Juan de la Cruz con notas autógrafas del fundador de la Orden de Carmelitas Descalzas, que ya fueron declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) en 2013.

Con la ley en una mano y con la declaración de intenciones de sus propietarios en la otra, ninguno de estos temores tendrían que hacerse realidad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios