"Cádiz es un bastión importante y la perspectiva es seguir creciendo"

"No hemos cambiado. Seguimos siendo el mismo banco y seguimos prestando". Tres años después de que estallara la crisis financiera y se multiplicara con la inmobiliaria, Deutsche Bank se mantiene fiel a su espíritu y eso le ha proporcionado un crecimiento "estable" en la provincia. "No estuvimos entre esos incrementos del 50%, siempre hemos evolucionado sosteniblemente y por eso ahora seguimos creciendo".

Es la lectura que hace el director regional de Deutsche Bank en Andalucía Occidental y Canarias, Fernando Candau del Cid, que detalla que el negocio en Cádiz subió el año pasado un 5% hasta los 5.700 millones de euros de activos gestionados, el tercer volumen de la Comunidad Autónoma. "Cádiz es un bastión importante en Andalucía" para Deutsche Bank y la perspectiva es "seguir creciendo", añade Candau del Cid. Sobre la cuota de mercado, dice desconocer el porcentaje o la posición que ocupa en el sistema bancario gaditano y argumenta que, a diferencia de otras entidades, la teutona "no entra en esa competencia, ni en guerras de comisiones" aunque asegura que en este sector las diferencias "no son grandes". "Los consumidores nos hemos dado cuenta de que el mejor precio no es el mejor producto y de que rentabilidad y riesgo van de la mano", en alusión a los fraudes millonarios que han salpicado las finanzas internacionales y nacionales durante la crisis.

La entidad alemana está presente en cinco localidades gaditanas (Cádiz, Jerez, Sancti Petri, Algeciras y Sotogrande) y, al igual que la actividad, la red se ha mantenido invariable en los últimos años. "Nuestro valor no es estar en cada esquina y el cliente está cada vez menos en las oficinas, aunque las oficinas sí estamos en el día a día del cliente". Con esta expresión define el tipo de atención que realiza el banco: "Tenemos un cliente fiel, que busca nuestra imagen de seguridad y solvencia, y al que damos un valor añadido a través de un asesoramiento personalizado". Esta política ha llevado hasta sus oficinas gaditanas a 12.000 clientes, entre los que, como es lógico, hay residentes alemanes e ingleses en la costa gaditana, especialmente en Chiclana. La recesión ha provocado un "descenso acentuado" en el flujo de actividad de esta colonia extranjera, pero las previsiones son optimistas porque "Alemania será el primer país que se recuperará y eso hará que vuelvan a la provincia", donde pasan largas temporadas durante los inviernos.

En este análisis resulta inevitable abordar dos cuestiones: las restricciones de acceso al crédito y la imagen del sector tras el llamado crash. Sobre lo primero, Candau del Cid defiende que Deutsche Bank no ha cambiado su política hipotecaria: "Nosotros no hemos cerrado el grifo, el banco nos invita a prestar y prueba de ello es que nuestro negocio hipotecario aumentó un 5,7% el año pasado en Cádiz". Respecto a las repercusiones inmateriales, el director regional admite que en el sector "hay una crisis de imagen importante", pero llama a hacer una reflexión porque, a su juicio, "todos somos un poco responsables" de la caída económica y remarca que "no todos los bancos estamos en el mismo hoyo".