La Unión Europea (UE) y Estados Unidos apoyan nuevas sanciones de Naciones Unidas contra Irán, en reacción a los provocadores pasos dados por Teherán respecto a su programa nuclear, según manifestaron ante la Junta de Gobernadores de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).

Sin embargo, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, de visita en Brasilia, fracasó en su intento de convencer el gobierno de Brasil -que integra el Consejo de Seguridad de la ONU en calidad de miembro no permanente- para sumarse al apoyo a sanciones contra el país persa.

Teherán, por su parte, advirtió de una pérdida de independencia de la AIEA y amenazó indirectamente con disminuir su cooperación, según se desprende de las declaraciones del embajador iraní ante el organismo en Viena, Asghar Soltanieh.