Ibiza vuelve a ser el lugar elegido por celebrities de todo el mundo para disfrutar de sus vacaciones. Así, coincidiendo con el inicio del mes de julio, este fin de semana han sido varios los rostros conocidos que se han dejado ver por la isla pitiusa, aunque no todos lo hacían para disfrutar de sus ratos de ocio sino también por motivos laborales.

En este último caso estaba la norteamericana Paris Hilton, que este sábado comenzó a colaborar con Amnesia, una de las discotecas más populares de la isla, en la que trabajará como DJ todos los fines de semana. Su llegada al local causó bastante expectación. Paris escogió para la ocasión un llamativo vestido dorado con transparencias y se mostró muy atenta con las decenas de seguidores que la esperaban en la entrada del local.

Pero no ha sido ella la única famosa que ha tomado el sol este fin de semana en Baleares. También ha escogido Ibiza como lugar vacacional la top Alessandra Ambrosio, que llegó a la isla el pasado sábado para pasar unos días de descanso en familia. La modelo de Victoria's Secret se ha dejado ver en la playa de Ses Salines con sus dos hijos pequeños, Anja Louise y Noah Phoenix, y su marido, Jaime Rotur, y se ha comportado como una auténtica madraza con sus hijos, con los que estuvo un buen rato jugando y haciéndoles fotos en el mar.

No es la primera vez que Ambrosio elige las playas de Ibiza para pasar unos días de descanso. El pasado verano también se dejó ver en la isla, aunque en aquella ocasión, aunque también disfrutó de la costa y de sus lugares de ocio, llegó por trabajo, ya que aprovechó su estancia para presentar la colección de baño de su firma Ale by Alexandra.

Este fin de semana también han desembarcado en la isla balear otros famosos como la cantante Mel B o la actriz Gabrielle Union, así como los jugadores de la NBA Lebron James, Dwaybe Wade y Chris Paul.

Otro que ha aprovechado los últimos días de junio para bañarse en las playas ibicencas ha sido el ex de Rihanna, el cantante Chris Brown, aunque en su caso la visita, o más bien la partida, ha llegado acompañada de polémica. Brown alquiló junto a un grupo de amigos una de las exclusivas villas de la isla y, al marcharse, el dueño de la vivienda acudió a la Guardia Civil para interponer una denuncia contra él por los destrozos ocasionados y porque aún no le había pagado el alquiler en su totalidad. Además de encontrarse marcas de cuchillos en las paredes y daños en el mobiliario, el dueño del inmueble denunció que algunas habitaciones estaban sucias de orina y de vómito, algo que el cantante se ha encargado de desmentir en las redes sociales mostrando vídeos de la vivienda en perfecto estado.