"Alguna que otra arritmia" que aún percibe obligará al actor malagueño Antonio Banderas, de 56 años, a pasar de nuevo por la mesa de operaciones tras superar el infarto que sufrió el pasado enero. Tras superar la grave dolencia que le llevó a replantearse todo lo trazado para este 2017, Banderas está preocupado con la continuación de las arritmias que venía sufriendo.

El regreso al quirófano lo ha confirmado el hermano del actor, Javier Banderas, en declaraciones al periódico La Razón. De la anterior operación el reconocido artista fue intervenido con la implantación de tres stents (dispositivos de muelle que controlan el tejido vascular) en las arterias coronarias. El propio intérprete reveló que también fue operado con un cateterismo para remediar esas arritmias que venía encarando desde años atrás y que aún han de ser ajustadas en la medida de lo posible. Banderas ha decidido que la mejor opción es volver al cirujano. Su ritmo de vida es mucho más tranquilo desde el infarto, revelado dos meses después de haber pasado por el hospital. El estrés en su trabajo le llevó a darle "una paliza" a su corazón. Su actual pareja, Nicole Kimpel, le añade estabilidad. Dentro de una semana presidirá en Marbella la gala Starlite.