La bodega del Castillo de San Marcos se llenó hasta la bandera para asistir al pregón de la Fiesta de los Patios, pronunciado por el abogado y colaborador de Diario de Cádiz Enrique Bartolomé.

El concejal David Calleja, durante su intervención.

En el mismo acto también se dieron a conocer el cartel anunciador de la fiesta, obra de Fátima Delgado Poullet, y de la ruta de los guisos, impulsado por la asociación de hosteleros del centro y que se desarrollará en torno a las fechas de la fiesta, en el mes de abril.

El presidente de la Asociación de Amigos de los Patios Portuenses, José Ignacio Delgado Poullet, fue el encargado de dar la bienvenida a los asistentes mientras que los ediles David Calleja y Olga de Navas descubrieron los carteles anunciadores de ambas citas.

Calleja  destacó el valor patrimonial de la fiesta de los patios y animó a sus responsables a seguir adelante. Por parte de los hosteleros del centro Mamen Fernández destacó que son 46 los establecimientos que hasta el momento se han sumado a esta ruta de guisos tradicionales.

Tanto Calleja como Navas se marcharon antes del pregón, nada más descubrir los carteles, y fue en ese momento cuando intervino el presentador del pregonero, Javier Thuiller, presidente del Ateneo del Vino y amigo de la infancia de Bartolomé.

La bodega del Castillo de San Marcos se llenó con ocasión del pregón de Bartolomé.

En el escenario se exhibían varios cuadros pintados por los alumnos de María Lizaso, uno de ellos el propio Bartolomé, cuadros que se pondrán a la venta durante la fiesta de los patios y cuyos beneficios irán a parar a la Asociación Portuense de Amigos Solidarios.

El pregonero estuvo arropado por un buen número de amigos y familiares, entre ellos su madre, Elisa, y sus dos hijos. Visiblemente emocionado durante todo el pregón, Enrique Bartolomé engarzó recuerdos propios de los patios que han marcado su vida con los de otros amigos que aportaron sus propias experiencias, como Mario Sancho,  Jesús Andrades, Javier Ruibal, Joaquín Moreno, María García, Pepe Mendoza o Manolo Morillo, que le prestaron sus vivencias y recuerdos para hacer un mapa  sentimental de los patios  andaluces.

Javier Ruibal también escribió un poema para la ocasión, que el pregonero compartió con el público. 

Otro momento del pregón.

Como Bartolomé recordó, él no es un pregonero al uso pero sí afirmó hablar con sinceridad sobre sus vivencias y recuerdos, sobre lo que denominó "las costumbres de andar por casa". Como dijo "no es nostalgia, sino rememorar una manera de vivir de los portuenses que hicieron grande nuestra ciudad".

En cuanto a los patios de vida, Bartolomé destacó el de la calle Cruces en el que vivió su abuela, el del Ejido de San Juan donde nació y el entorno de La Puntilla donde pasó su infancia y juventud, y donde aún vive su madre. "Allí el patio eran la calle, la playa y el pinar, pero el espíritu de la vida compartida era  el mismo que el de cualquier patio de vecinos.

El pregonero animó al público, al final de su intervención, a luchar por cumplir sus sueños, por imposibles que parezcan, a mirar el futuro con ilusión y a cultivar el tesoro de la amistad.

Al término del pregón la Asociación de Amigos de los Patios entregó un plato de cerámica a la asociación Sherry Explorer, activa colaboradora de la fiesta de los patios.