Una carretera señalizada mediante conos y limitada la circulación a 60 kilómetros por hora; dos viaductos a medio hacer; algunos tramos con una pequeña capa de asfalto; y un acceso a la ciudad cortado desde hace más de dos años. Esa es la situación, a día de hoy, de la Variante de Rota (A-491) que lleva en obras desde hace año y medio. Sin embargo, este periódico ha corroborado que desde hace aproximadamente un mes no se trabaja en ella. De hecho, los únicos operarios que se han visto a lo largo de esta semana se han limitado a montar nuevas señales para advertir a los conductores de que es una vía en obras.

Sin embargo, hace semanas que la empresa adjudicataria de los trabajos, la UTE (Unión Temporal de Empresas) conformada por Aldesa y Pérez Jiménez, se llevaron las maquinarias que hasta no hace mucho trabajaban en esta carretera. Ante esto, este medio preguntó en la mañana de ayer a la Delegación Provincial de Obras Públicas por los motivos de la paralización sin obtener respuesta.

Fue en octubre de 2009 cuando se iniciaron las obras de duplicación de esta carretera en el tramo comprendido entre el kilómetro 15 y el 24. El proyecto contempla que todo el recorrido de esta vía autonómica por el término municipal portuense pase a ser autovía, una doble calzada que llegará hasta las inmediaciones de la A-2078 (carretera que une Rota con Jerez) ya en el término municipal roteño.

Sin embargo, las declaraciones que los responsables autonómicos han realizado sobre la ejecución de estos trabajos siempre han sido contradictorias. Para empezar esta actuación entró dentro del grupo de obras que han sido "reprogramadas" por la Junta de Andalucía debido a la merma de ingresos por la actual situación de crisis económica. El anuncio se hizo en el verano del año pasado y entonces, el delegado provincial de Obras Públicas, Pablo Lorenzo, señaló que esta actuación se ralentizaría unos siete meses ya que no es "tan prioritaria". Así, fijaba la conclusión de la duplicación para junio de 2012 (inicialmente estaba previsto para octubre de este año). Sin embargo, un mes después, Lorenzo señalaba que no iba a haber retraso alguno en la ejecución sino que se había llegado a un acuerdo con la empresa adjudicataria para "reprogramar" los pagos. Los trabajos continuaron entonces pero su ritmo decayó notablemente.

En cambio, la consejera de Obras Públicas, Josefina Cruz, comentó la semana pasada durante la apertura del último tramo que conectará esta carretera con la A-4 (Variante de los Puertos) que la obra no tiene plazo de finalización puesto que es un "mal momento presupuestario". Eso sí, entonces no se apuntó que la obra ya estaba parada.

Así, en los últimos días se ha procedido únicamente a tratar de reforzar la seguridad en la vía , en especial tras una denuncia de los propietarios de Bella Bahía que alertaban de la existencia de una gran franja de medio metro de profundidad a lo largo del arcén de la carretera que podría suponer un peligro para la circulación. Tras esto la empresa adjudicataria procedió a colocar unos quitamiedos de plástico en algunas partes de la vía.

Mientras tanto, sigue cerrado el acceso a El Puerto a la altura de Molino Platero para aquellos vehículos que procedan de la Costa Noroeste,, una vía que se cerró para duplicar el viaducto de la Bola del Mundo, cuya estructura está finalizada pero que aún queda por asfaltar. Asimismo, en este punto queda pendiente la construcción de un nuevo acceso que conectará la avenida Víctimas del Terrorismo con el vial de servicio que dará a acceso a los diseminados ilegales que se encuentran en una de las márgenes de esta carretera. Tampoco se ha concluido el carril de incorporación a la autovía en Molino Platero por lo que los vehículos están obligados a seguir utilizando uno temporal que se habilitó junto al restaurante El Jamón.

Mientras tanto, está a a medias el futuro viaducto que conectará la Variante de Rota con la Carretera de Fuentebravía (C-603) a la altura de los depósitos de CLH.