La recogida selectiva de residuos ha mejorado en la ciudad a raíz de las inversiones realizadas tanto en la planta de tratamiento como en la insfraestructura necesaria para recuperar los residuos sólidos susceptibles de ser reciclados. No obstante, en muchas isletas ecológicas no están todos los contenedores de reciclaje, es decir están incompletas, de manera que el ciudadano no encuentra por ejemplo el contenedor para el vidrio en la de la Plaza del Polvorista, debiendo desplazarse hasta el Parque Calderón para depositar los envases de ese tipo. No obstante, ahora tienen contenedores nuevos de carga lateral, de los que se han colocado algo más de 500 para envases y papel/cartón, "con nuevos equipos de recogida de mayor capacidad y eficacia", según apunta el Ayuntamiento (Concejalía de Medio Ambiente) en su balance de actividad de los seis primeros meses de la nueva concesionaria Urbaser, que se ocupa de gestionar el Centro de Recepción de Reciclaje (CRR), la planta de tratamiento de envases con sede en el polígono de Las Salinas.

La empresa Urbaser opera el servicio desde el 1 de enero, con arreglo a un nuevo contrato que el Ayuntamiento licitó por 9 años, en la modalidad de 'riesgo y ventura'. El cambio de gestión produce un ahorro a las arcas municipales de 750.000 euros, y ahora pasará a ingresar 250.000 euros anuales en concepto de canon por la explotación del servicio.

En cuanto a las instalaciones del CRR, se ha completado la automatización de la planta de reciclaje al 100%, lo que supone, según el alcalde Alfonso Candón, "un aumento en la eficiencia de la clasificación de los envases. Gracias a estas mejoras, prácticamente todo el material que puede reciclarse se separa", mientras anteriormente había un 30% de rechazo.

En paralelo a las mejoras en la planta y vinculado al mismo servicio se ha implantado la carga lateral en la recogida selectiva de residuos. En total, la inversión ha sido de 1.800.000 euros, de los cuales 800.000 euros se invirtieron en mejoras técnicas de la planta y 1.000.000 de euros en mejoras del servicio de recogida selectiva. Los nuevos contenedores presentan la misma estética que los de basura orgánica, ofreciendo las isletas de reciclaje una mayor homogeneidad.

Con la reinauguración del CRR el 2 de junio culminó el proceso de automatización de la planta municipal de envases, que comenzó en 2006 con una primera fase de mecanización, convirtiéndose en un centro de selección de residuos totalmente automático. Para ello, se instalaron nuevos equipos y se amplió la zona de descarga, se colocaron nuevos visores ópticos de separación, prensas de mayor capacidad y nueva distribución de la maquinaria. Asimismo se reforzaron los sistemas de mantenimiento y seguridad. Con estas reformas, valoradas en más de 400.000 euros, la planta ha aumentado su producción, incrementando su rendimiento, y mejorando la efectividad de la selección, llegando prácticamente a separar todo el material procedente de 16 municipios de la provincia que usan el CRR. Beneficiarios de las mejoras han sido los operarios de la planta que se han transformado en controladores de la calidad final del proceso, dejando de hacer un trabajo duro y manual.

Candón ha mostrado su satisfacción por los resultados obtenidos que confirman que no sólo recupera la producción de residuos, sino que empieza a incrementarse sobre los ejercicios anteriores.

Además, se mantienen los 30 puestos de trabajo de la plantilla, que se aumenta en los picos de más producción a lo largo del año, de manera que la planta en la actualidad se encuentra a doble turno. El sistema de gestión y reciclado final de los materiales que entran en el CRR está financiado por Ecoembes, empresa sin ánimo de lucro formada por fabricantes y distribuidores de envases.